100 AÑOS DEL NKP – RECONSTITUIR EL PARTIDO COMUNISTA DE NORUEGA

Publicamos una traducción no oficial de un artículo encontrado aquí.

¡Proletarios de todos los países, uníos!

Octubre 2023

100 AÑOS DEL NKP – RECONSTITUIR EL PARTIDO COMUNISTA DE NORUEGA

Introducción

El Partido Comunista de Noruega fue fundado el 4 de noviembre de 1923, como la sección noruega de la Internacional Comunista, después de una dura lucha de dos líneas en el Partido Laborista Noruego. Como una parte integrante del Movimiento Comunista Internacional, y bajo la dirección del Gran Lenin y del camarada Stalin, el Partido organizó a miles de obreros en Noruega en duras bregas. El Partido Comunista de Noruega es la vanguardia organizada de la clase obrera en Noruega y liderará al proletariado en la lucha hasta el Comunismo.

En el periodo de 1970-1975 la degeneración revisionista del Partido culminó con algunos eventos importantes: Primero, la vanguardia de la izquierda en el Partido fue expulsada mediante procesos criminales, después, el Partido fue disuelto en favor del nuevo Partido de Izquierda Socialista (SV), y la mayoría de los miembros del Partido se unieron al proyecto socialdemócrata, y finalmente el Partido fue “reconstituido” en 1975 como Partido Brezhnevista, que siguió el liderazgo del socialfascista y socialimperialista “PCUS”.

Así, el “NKP” de hoy no puede ser llamado un Partido Comunista real, pero el proletariado necesita su Partido. Sólo el Partido Comunista puede liderar la lucha de clase del proletariado, unir al pueblo obrero entorno al proletariado, y liderar la revolución socialista hasta la victoria, establecer la dictadura del proletariado y liderar el desarrollo de la sociedad a través de revoluciones culturales hasta el Comunismo. Revoluciones de Nueva Democracia y Socialistas son necesarias para acabar con el sistema que arrasa el mundo con guerra, hambruna, pobreza y miseria, para crear la sociedad comunista sin clases. Así es hoy una necesidad histórica y política el reconstituir el Partido Comunista de Noruega, basado en y guiado por el Marxismo-Leninismo-Maoísmo, principalmente Maoísmo, e iniciar la guerra popular en Noruega, como parte y al servicio de la Revolución Proletaria Mundial, tan pronto como sea posible.

1. La orgullosa historia del Partido

El proletariado moderno se alzó y creció con fuerza en Noruega durante el siglo XIX en línea con la industrialización, particularmente en la segunda mitad, donde el proletariado se organizó en sindicatos y eventualmente estableció el primer Partido Laborista en el país.

La izquierda en el Partido Laborista Noruego (DNA) tomó la dirección en 1918, en un contexto internacional y nacional marcado por la Guerra Mundial, la Revolución de Octubre, y un poderoso movimiento del consejista obrero en nuestro país. Bajo el liderazgo de la izquierda, el Partido Laborista se convirtió en miembro de la Internacional Comunista en 1919. Pero la derecha en el Partido trabajó sistemáticamente para socavar la membresía. Los oportunistas de derecha, bajo la jefatura de Martin Tranmæl, sabotearon las resoluciones de la Internacional Comunista. Tranmæl ocultó sus argumentos en frases radicales de «izquierda», pero el contenido era el oportunismo de derecha. Su principal exigencia fue la «independencia nacional» para el Partido, que los oportunistas de derecha establecieron en oposición al internacionalismo y el centralismo democrático en la Internacional.

Varios años de lucha entre la izquierda y los oportunistas de derecha en el DNA llevó al final a una escisión en la Conferencia Nacional extraordinaria del 2 al 4 de noviembre de 1923. Los oportunistas de derecha jugaron con el nacionalismo en forma de autonomía y una demanda de «autodeterminación» de la Komintern y se enfocaron de forma unilateral en la lucha económica, contra la disciplina proletaria y el centralismo democrático y pusieron a las masas contra la dirección al calumniarla. La izquierda en el Partido intentó, junto con el centro, alcanzar un compromiso, pero la posición de Tranmæl buscó escindirse. Esto, a pesar de la dura confrontación que tuvo lugar lugar exactamente en este momento entre la reacción y la revolución a nivel internacional. El proletariado armado estaba en lucha directa contra el enemigo en Alemania, sólo cuatro años después de que los socialdemócratas asesinaran a los grandes líderes comunistas Luxemburgo y Liebknecht en 1919, y la conferencia tuvo lugar apenas dos semanas después del levantamiento rojo en Hamburgo. Miles de trabajadores rojos, hombres, mujeres y niños, se enviaron a los campos de concentración del enemigo en Finlandia. El joven Estado soviético luchó contra las campañas de terror y aislamiento por parte de una reacción mundial unida. En medio de esta situación, la derecha pidió al DNA que abandonara su posición, su lugar en las filas y dividió la unidad política de la clase obrera.

La lucha en el DNA no tuvo lugar separada de este contexto más amplio. El Partido Comunista de Noruega fue desde el primer momento un hijo de la lucha internacional contra la reacción, el imperialismo y el revisionismo. Una gran minoría en la conferencia nacional del DNA rechazó el oportunismo de derecha y el socialchovinismo. Eligieron a la Internacional Comunista y al Proletariado Internacional, se escindieron y abandonaron la conferencia, y se constituyeron el 4 de noviembre en la primera conferencia del Partido Comunista de Noruega, sección noruega de la Internacional Comunista.

Desde el primer momento, el Partido participó en grandes luchas y organizó a una gran parte de las masas hondas y profundas de Noruega. Los comunistas asumieron un papel principal en la huelga de hierro en 1923. En la batalla de Menstad en Skien en junio de 1931, los comunistas dirigieron una manifestación militante de 2000 trabajadores que atacaron a los rompehuelgas y a la policía. Cuando los trabajadores rojos ganaron esta batalla, el Estado burgués uso sus medios militares para aplastar la lucha. Los dirigentes del Partido tuvieron que ir a prisión.

El NKP organizó a miles de mujeres clase obrera en las asociaciones de amas de casa. Muchas de estas mujeres se convirtieron en miembros del Partido. El Partido se unió a las mujeres de clase obrera como un defensor de los derechos de las mujeres, particularmente los derechos económicos y sociales, que han sido muy importantes para las masas de mujeres de clase obrera. El Partido también desempeñó un papel importante en la organización de la lucha de los obreros del bosque en las partes más pobres del país, particularmente Hedmark. El Partido Comunista de Noruega no era sólo un nombre de un grupo, organización o Partido, como se usa hoy para el Partido revisionista. El Partido Comunista de Noruega es, para siempre, el nombre de la única vanguardia del proletariado internacional y los obreros en Noruega.

Durante la Segunda Guerra Mundial y la ocupación fascista, nuestro Partido tuvo más de 200 mártires que cayeron en una lucha honorable contra la ocupación fascista. Miles de comunistas y revolucionarios fueron perseguidos, encarcelados, torturados o enviados a los campos de concentración de los nazis. ¡Nada puede borrar este sacrificio! Los culpables y los cómplices son criminales del peor tipo, que tiene una sangrienta cuenta que pagar a nuestra Clase y a nuestro Partido. Entre los cómplices de Hitler y el fascismo en esta injusticia, así como el genocidio contra los judíos noruegos y la incontable opresión y persecución de otros antifascistas, está la policía burguesa noruega, el Estado noruego burgués, los capitalistas noruegos que actuaron como colaboradores durante la guerra, y los gobiernos socialdemócratas de antes, durante y posteriores a la guerra. Los gobiernos socialdemócratas, en colaboración con el imperialismo yanqui y el imperialismo británico, persiguieron comunistas, sabotearon la resistencia, organizaron a los soplones a gran escala e iniciaron la supresión de revolucionarios y comunistas después de la guerra. Los líderes socialdemócratas hicieron esto como parte de la cruzada internacional contra la Unión Soviética.

2. El revisionismo liquida al Partido

Durante la Segunda Guerra Mundial, el revisionista Peder Furubotn usurpó el aparato central del Partido. Desde la posición de «presidente» no elegido del Partido, liquidó el ejército del Partido, la Guardia Nacional, y saboteó la resistencia activa dirigida por Asbjørn Sunde (camarada Osvald). Furubotn liquidó la independencia del Partido sometiéndose bajo el frente de resistencia burgués y el gobierno del Partido Laborista en Londres. Su línea era nacionalista, y después de la guerra representó la línea para la paz con el enemigo de clase, la «reconstrucción» y el aumento de la «productividad». Su revisionismo y oportunismo fue desvelado por el camarada Stalin y el Partido Comunista de la Unión Soviética, y el NKP inició un ajuste de cuentas con la camarilla de Furubotn. Esta camarilla operaba como una facción en el Partido, y constantemente violó el centralismo democrático. Su línea fue revelada como nacionalista burguesa y titoísta, y en 1949 Furubotn y sus compinches fueron expulsados del Partido en una dura lucha de dos líneas.

El ajuste de cuentas con Furubotn no fue lo suficientemente profundo, y cuando el traidor Kruschov, se hizo cargo del poder en el Partido Comunista de la Unión Soviética con la muerte de Stalin en 1953, y consolidó el revisionismo en el poder del Partido con el Congreso del Partido en 1956, la dirección del comunista Partido de Noruega no pudo revelar el revisionismo moderno. En lugar de ello, la dirección del Partido se convirtió en un centro revisionista en el Partido noruego. A pesar de la dura resistencia de la izquierda, liderados por comunistas genuinos como Kjell Hovden, Esther Bergerud y el camarada Osvald, el revisionismo y el oportunismo mantuvieron su control sobre la dirección del Partido. La izquierda tuvo una victoria temporal en 1967, en la lucha contra la posición de Vogt en la dirección del Partido, que quería una línea revisionista más clara, pero en 1970 los líderes de la izquierda dentro del Partido fueron excluidos. Estos ya se habían reorganizaron bajo el nombre del Frente Marxista-Leninista (MLF), y plantearon la lucha para crear un Partido Comunista real. El MLF se convirtió en parte del nuevo «movimiento marxista-leninista» del que también MLG y SUF (m-l) eran parte. Hubo una fuerte lucha de dos líneas dentro de este movimiento desde el inicio. Una camarilla pequeño-burguesa proveniente del SUF (m-l) ganó la hegemonía en el movimiento, y lideró la fundación del AKP (m-l) [Partido Comunista de los Trabajadores (marxista-leninista)] en 1973. En pocos años se revelaron como revisionistas y el desarrollo revisionista de AKP (m-l) culminó en el período de 1977 a 1984, donde el Partido entró en una profunda crisis. La dirección del Partido apoyó la camarilla revisionista de Hua-Deng cuando usurparon el poder en el Partido Comunista de China en 1976. La Conferencia Nacional de AKP (m-l) adoptó un programa de Partido revisionista en 1984.

Todavía debemos resaltar a la izquierda en el «Movimiento – ML», que luchó todo el tiempo contra las peores manifestaciones del revisionismo y el oportunismo de derecha. El MLF luchó contra el nacionalismo en el AKP (m-l), y para un Partido basado en el proletariado. La izquierda del AKP (m-l) luchó contra la orientación hacia las elecciones, la disolución del centralismo democrático, el reformismo, el burocratismo y otras manifestaciones de la línea revisionista en la dirección. La degeneración final del AKP (m-l) se cumplió por primera vez en 2007, cuando el Partido se liquidó a favor del Partido Socialdemócrata «Rojo». En 2008, múltiples comunistas fueron excluidos de los Juventud Roja y de Rojo, porque levantaron el estandarte de la organización comunista.

3. El Partido debe ser reconstituido

La historia nos enseña con toda claridad posible de que el revisionismo es el enemigo mortal de el Partido. Además, tenemos que resaltar que la izquierda siempre estuvo allí y luchó todo el tiempo. Dos deficiencias significativas de la izquierda del NKP y del AKP (m-l) fue la comprensión de la ideología y del Partido. Sin una comprensión correcta de la ideología, hoy en día el marxismo-leninismo-maoísmo, uno no puede entender ni derrotar al revisionismo. Sin una comprensión correcta del Partido, uno no entiende que el Partido Comunista de Noruega, fundado el 4 de noviembre de 1923, como parte marxista-leninista y la sección noruega de la Internacional Comunista, es el único Partido del proletariado. El Partido ya está fundado y, por lo tanto, no se puede fundar nuevamente. La tarea histórica y política para los comunistas por lo tanto no es fundar un «Partido Comunista», sino reconstituir al Partido Comunista de Noruega.

El revisionismo es una forma de ideología burguesa. Está claramente definido y probado por Lenin. El revisionismo es el socialismo burgués que se abre paso en el movimiento obrero en un disfraz rojo. Después de que el marxismo hubiese ganado la hegemonía en el movimiento de los obreros, el socialismo burgués fue introducido de contrabando en el movimiento cuando se revisó el «marxismo». Con Khrushchev y Brezhnev repitieron ésto ellos mismos en el PCUS y en el Movimiento Comunista Internacional. El revisionismo moderno estaba disfrazado de «marxismo-leninismo». Después del golpe de estado en China en 1976 por la camarilla de Hua-Deng, un golpe que fue dirigido con el ejército y un departamento propio del Servicio de Inteligencia, que le costó la vida a miles de revolucionarios y comunistas, el revisionismo en China tomó el “Pensamiento Mao Tse-Tung” como disfraz.

Las nuevas formas de revisionismo se disfrazan hoy en día como «marxismo-leninismo-maoísmo». El más delincuente y criminal de éstos ha elevado el estandarte negro en Perú, bajo la máscara del “Pensamiento Gonzalo” . Estos delincuentes ensucian el nombre del Presidente Gonzalo. El Pensamiento Gonzalo es el marxismo-leninismo-maoísmo aplicado a las condiciones concretas del Perú, y ha dado contribuciones de validez universal a la ideología del proletariado. Así como el proletariado sólo tiene un Partido, el Partido Comunista, también sólo tenemos una ideología: el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo, con las contribuciones de validez universal del Presidente Gonzalo.

La contribución más importante del Presidente Gonzalo es su correcta definición de maoísmo, como la nueva, tercera y superior etapa de la ideología del proletariado. El maoísmo es universalmente aplicable en todos los países, es la cosmovisión del proletariado. Con el maoísmo, el proletariado obtiene su teoría militar: la guerra popular. El Presidente Gonzalo descubrió que para liderar a los pueblos, los Partidos Comunistas debían estar militarizados. El Partido tiene que liderar su propia construcción y la construcción del Ejército Popular y el Frente Único Revolucionario. El Presidente Gonzalo nos muestra que ésta debe ser concéntrica, con el partido en el centro como el líder de todo, y como la dirección absoluta del Ejército Popular, y que utiliza al Ejército Popular para construir el Frente Único Revolucionario, que el Partido también lidera. Con el Ejército Popular y el Frente Único, el proletariado puede librar la guerra popular y construir nuevo poder, que es el núcleo de la Guerra Popular.

El Partido Comunista de Noruega debe ser reconstituido como un Partido maoísta y militarizado. La militarización se expresa organizativamente en la construcción concéntrica del Partido, el Ejército y el Frente. El propósito del Partido es librar la guerra popular, conquistar y defender el poder para el proletariado. Esta es el único camino hacia el Socialismo y el Comunismo, el único sendero para la liberación.

La perspectiva de la lucha del proletariado – una poderosa lucha de clase que ha estado en curso desde que la clase dio sus primeros pasos, y donde podemos señalar hitos como la Comuna de París en 1871, la Revolución de 1905 en Rusia, la Revolución Rusa en 1917, la República Popular de China en 1949, la Gran Revolución Cultural Proletaria iniciada en 1966 y el inicio de la Guerra Popular en Perú en 1980 – es que nuestra clase es la única clase que disolverá todas las clases, al liderar su lucha por la victoria. Conquistar el poder es sólo el primer paso. Después de conquistar el poder, el proletariado continuará la lucha por expandir su poder a todas las áreas de la sociedad. Utilizará el poder para disolver la explotación, disolver todas las relaciones capitalistas y, por último, para disolver las clases y el estado mismo como una máquina de opresión de clase. Como tal, la explotación y opresión de clase es barrida de la faz de la tierra.

El Presidente Mao nos ha enseñado que el poder proletario tiene que defenderse y expandirse en el socialismo a través de revoluciones culturales, hasta el Comunismo sin clases. El Presidente Gonzalo revela que los revisionistas en China pudieron suprimir y detener la revolución cultural y apoderarse del poder, porque se hicieron cargo del Ejército Popular desde dentro y desde la cúpula. Así, el Presidente Gonzalo plantea la necesidad del mar armado de masas, y del Ejército Popular que incorpora a las Milicias Populares, y armar a todo el pueblo para defender el poder del proletariado y librar revoluciones culturales, sin dar a los burgueses y a los revisionistas ninguna oportunidad para reorganizarse y hacer una “restauración”. Sabemos, y la Unión Soviética y China lo han mostrado en la práctica, que el revisionismo en el poder es la burguesía en el poder, que los burgueses restaurarán la explotación y la opresión capitalista, y que ellos, para aplastar la dictadura del proletariado, lo tienen que hacer con métodos fascistas. Por lo tanto, el revisionismo impone fascismo, y lo que vemos hoy en China es un gobierno social-fascista, con ambiciones de hacer de China una superpotencia social-imperialista que estira sus tentáculos en todo el mundo. Por lo tanto, una nueva revolución socialista está en la agenda en China, y sólo un Partido Comunista Reconstituido de China, armado con el marxismo-leninismo-maoísmo, puede asumir esta tarea.

La tarea más importante para los comunistas en Noruega es reconstituir el Partido Comunista de Noruega, como un Partido de nuevo tipo, un Partido militarizado, basado y guiado por el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo, con las aportaciones de validez universal del Presidente Gonzalo.

El Partido Comunista del Perú escribe: “El proletariado genera aparato político: Partido Comunista totalmente opuesto y distinto a los demás Partidos con el objetivo de tomar el poder político, así lo definió Marx. Lenin estableció los caracteres del Partido de nuevo tipo combatiendo la influencia socavadora del viejo revisionismo que generó Partidos obreros burgueses basados en la aristocracia obrera, la burocracia sindical, el cretinismo parlamentario y amoldados al orden. El Presidente Mao Tsetung desarrolló la construcción del Partido en torno al fusil y planteó la construcción de los tres instrumentos. El Presidente Gonzalo establece la tesis de la militarización de los Partidos comunistas y la construcción concéntrica de los tres instrumentos.”

El Partido Comunista es el Partido del Proletariado. La tarea del Partido es dirigir el proletariado a través de la guerra revolucionaria, para conquistar el poder político. El Partido sólo puede funcionar como dirección siempre que organice aquellos miembros de la clase que son más activos y más dispuestos a sacrificar, aquellos que voluntariamente y de su propia conciencia se unen al Partido, y mientras el Partido los organice con la disciplina más estricta basada en el centralismo democrático, principalmente centralismo.

Conclusión

Afirmamos que el «NKP» de hoy no es el Partido Comunista de Noruega, es un partido revisionista. Afirmamos que no existe una diferencia cualitativa entre el Partido revisionista y el «Rojo», las diferencias son sólo la forma y el tamaño cuantitativo. La esencia, la ideología y la política, es común entre los dos partidos: el revisionismo y el oportunismo. El programa del Partido revisionista no es un programa para la Guerra Revolucionaria, es un programa para la «transición pacífica». Además, el Partido revisionista es parte de un movimiento internacional donde participan muchos Partidos con las manos manchadas de sangre, como el Partido revisionista ruso, el Partido revisionista de Cuba, el Partido revisionista en Corea, y los revisionistas en India – y también mantienen un contacto cercano con los socialfascistas en China.

Por lo tanto, es la tarea de los comunistas dedicarse completamente a reconstituir completamente el Partido Comunista de Noruega e iniciar la Guerra Popular – el único sendero para hacia la liberación del proletariado y los pueblos oprimidos del mundo.

¡Abajo el revisionismo! ¡Viva el Maoísmo!

¡100 años del NKP – Reconstituir el Partido Comunista de Noruega!

Consejo editorial del periódico Bandera Roja
Octubre 2023

Previous post Indonesia: un Estado al servicio del imperialismo que aplica políticas genocidas
Next post La Resistencia Nacional Palestina hace retroceder las redadas israelíes