INDIA: Comunicado de FACAM sobre la Operación Clean

A continuación publicamos una traducción no oficial de un comunicado que hemos recibido del Foro Contra la Corporativización y la Militarización.

23 de julio de 2024


Han llegado noticias desde Jharkhand sobre el terrorismo de Estado que el Estado indio está desatando contra el campesinado adivasi como parte de su Operación Clean [Nota del traductor: limpieza]. El Estado indio ha estado estableciendo nuevos campamentos operativos avanzados en la División Kolhaan de Jharkhand como parte de esta Operación Clean. El pueblo de Kolhaan, especialmente en las zonas de Lovad y Lipunga del distrito de West Singhbum, han estado protestando contra estos campamentos debido a la violencia que han enfrentado los adivasis por parte de las fuerzas estatales en los bosques de Saranda, cerca de Kolhaan, como parte de la Operación Anaconda, la predecesora de la Operación Clean. Se ordenó a las fuerzas paramilitares que dispararan contra los adivasis que protestaban en la zona. Durante 15 días, los aldeanos se enfrentaron a disparos intermitentes. Incluso hubo casos de lanzamiento de cohetes en los alrededores de las aldeas. En los últimos meses, también ha habido casos de dos falsos encuentros en la región de Kolhaan. En primer lugar en Jharkhand, se produjo un intercambio de disparos entre el PLGA del PCI (Maoísta) y las fuerzas paramilitares, en este enfrentamiento. Budhveer del PLGA, que lideraba el escuadrón resultó herido en una pierna. Como quedó inmóvil, entregó su arma a sus compañeros y les pidió que huyeran. El Estado capturó al individuo inmóvil y desarmado, lo torturó y lo mató. El Estado no siguió el debido procedimiento que debe seguir cuando se detiene a un maoísta. Los maoístas son ciudadanos del país y por lo tanto, tienen los mismos derechos que cualquier ciudadano tendrá dentro del país, esto incluye el derecho a un proceso judicial apropiado antes de ser castigado. El ejecutivo del Estado no tiene derecho a asesinar a un individuo a sangre fría. Además, esto va en contra del artículo 13 de la Convención de Ginebra, que ha declarado claramente que no se puede realizar ningún tipo de mutilación, tortura o daño corporal a los prisioneros de guerra. Después de este incidente, dos mujeres del PLGA también fueron capturadas, violadas y luego asesinadas por el Estado. El Estado también ha utilizado la tortura sexual contra sus propios ciudadanos en este incidente. Esta violencia continúa para apoderarse de la tierra de los Adivasis y saquear los recursos bajo el suelo de Kolhaan.

La región de Singhbum, que pertenece a Kolhaan, tiene una de las mayores reservas de mineral de hierro. Aquí se encuentra el 28% de las reservas indias. La zona de Singhbum tiene hierro de alta calidad que puede durar al menos cien años. La región tiene otros 13 minerales, entre ellos oro, manganeso, níquel y cromo. Muchos de estos minerales también pueden utilizarse para la producción de acero. Jharkhand como tal tiene 32 tribus diferentes, de las cuales las más destacadas son los Ho, los Santhals, los Oraon y los Munda, otras incluyen las tribus Asur, Birhur, Korwa y Pahariya. La mayoría de estas tribus están ubicadas en la región de Singhbhum en Kolhaan. El campesinado adivasi de la región ha tenido una rica historia de lucha contra la invasión extranjera. Esta era un área que nunca estuvo bajo la subyugación de los mogoles y los maratha. Cuando los británicos intentaron subyugarlos, los adivasis opusieron resistencia. Los Ho se rebelaron contra los británicos entre 1827 y 1836. Birsa Munda también dirigió su Ulgulan contra los británicos en Jharkhand y en él también participaron los campesinos adivasi de Singhbum. Los británicos se vieron obligados a proporcionar cierto nivel de autonomía a estas comunidades como resultado de esta rebelión. Después de la transferencia del poder, el Estado indio les quitó la autonomía que los británicos otorgaron a los adivasis. El Estado ha intentado quitarle las tierras al campesinado adivasi y transferirlas a las potencias imperialistas. Esto se está haciendo a través de operaciones militares como la Operación Clean.

La Operación Clean se desarrolló como parte de la Operación Samadhan-Prahar, que se inició en 2017 después de la derrota de la Operación Green Hunt. Es similar a la Operación Kagaar, que también se lanzó como parte de la Operación Samdhan-Prahar, para acabar con la resistencia de los campesinos adivasi en zonas a las que el Estado ha tenido acceso limitado debido a los movimientos del campesinado adivasi. Samadhan busca poner fin a toda resistencia contra las operaciones mineras y las posiciones democráticas de la comunidad Adivasi. La Operación Clean es una sucesora de la Operación Anaconda que se lanzó para desplazar a los campesinos adivasi en la región de Saranda en Jharkhand para asegurar el saqueo corporativo contra el campesinado adivasi. La Operación Anaconda fue parte de la Operación Green Hunt, que se inició para desatar un genocidio contra los campesinos adivasi. En Jharkhand también se utilizaron tácticas similares a las utilizadas por el Estado en Bastar como parte de la Operación Green Hunt. Así como el Estado organizó una milicia fascista llamada Salwa Judum, el Estado también organizó varias milicias armadas como parte de la Operación Anaconda.

Grupos como el Comité Tritiya Sammelan Prastuti (TSPC), el Frente Popular de Liberación de la India (PLFI), Pahadi Cheetah y Shanti Sena son grupos armados que amenazan y acosan constantemente a los adivasis que pertenecen a la tierra. Estos grupos fueron creados por agencias de seguridad del Estado, aunque el Estado niega estas afirmaciones. TSPC y organizaciones similares reciben financiación de empresas. Las empresas afirman que estos grupos utilizan la violencia para exigir extorsión o sobornos. Sin embargo, estos grupos armados trabajan en beneficio de las corporaciones, ya que brindan protección a las empresas mineras y a los contratistas intimidando a los aldeanos para que abandonen sus tierras y puedan ser adquiridas para la minería.

Anaconda fue una operación genocida para derribar la resistencia local a la minería. Los encuentros falsos y las violaciones de campesinos adivasis eran comunes en la zona. Después de que los maoístas fueron expulsados por completo de los bosques de Saranda, el Estado intensificó su violencia genocida contra el campesinado adivasi. Los paramilitares entraron en las aldeas y atacaron a los aldeanos, les quitaron cualquier documento que probara que la tierra pertenecía a los adivasi y los quemaron. Hubo un aumento de las violaciones y los asesinatos presenciales de campesinos adivasis, con el fin de intimidarlos para que abandonaran sus propias tierras. El campesinado adivasi fue desplazado de las diferentes zonas de los bosques de Saranda, y luego las tierras fueron entregadas a las empresas mineras. Se construyeron grandes carreteras sobre el terreno para los camiones de las empresas mineras. Esto también afectó el medio ambiente de los bosques. Los bosques de Saranda eran equivalentes a los bosques amazónicos de los estados de Jharkhand y partes de Bihar y Bengala Occidental. Había varios arroyos perennes que regaban la región. Estas corrientes perennes fueron arrasadas por las minas. Los acuíferos subterráneos también quedaron completamente contaminados. Las enfermedades renales y hepáticas se volvieron endémicas en la región. Cuando se les preguntó a las empresas mineras sobre esto, dieron como respuesta que se debía a un aumento en el consumo de alcohol, pero realmente es imposible que las mujeres, los hombres, los viejos, los jóvenes y toda la población tenga un problema con la bebida. Además, se comprobó que se trataba de enfermedades que surgían como consecuencia de la minería. La esperanza de vida media de un adivasi en el bosque de Saranda llegó a ser de 45 años. La fertilidad de la tierra disminuyó drásticamente y la zona quedó azotada por la sequía. Más tarde, el estado utilizó la NIA y otras agencias estatales para intimidar también al movimiento en defensa de los derechos civiles. Activistas como Stan Swamy fueron arrestados y luego asesinados en prisión por parte del Estado. Periodistas como Rupesh Kumar Singh también permanecieron arrestados bajo la UAPA, Damodar Turi del Visthapan Virodhi Jan Andolan, fue constantemente acosado por el estado, no puede continuar su trabajo debido a los incesantes arrestos y otras formas de represión estatal. Todos estos individuos eran activistas por los derechos civiles que trabajaban por los derechos del campesinado adivasi. De manera similar, incluso las organizaciones de la clase obrera como MSS y ABMS fueron prohibidas. El Estado está tratando de garantizar que la gente no se organice de ninguna manera contra el saqueo corporativo. El gobierno llamó a esto el modelo de desarrollo de Saranda. También introdujeron planes de bienestar a través de este modelo, pero estos planes no tuvieron mucho éxito. Se implementó MGNREGA en la zona, pero el campesinado adivasi ni siquiera recibió una compensación adecuada en virtud del plan. Así, el modelo de desarrollo de Saranda implicó la eliminación de cualquier resistencia local de un área particular mediante la violencia genocida, y luego el establecimiento de minas y otros proyectos de infraestructura para el saqueo corporativo de la tierra. El Estado ha declarado que establecerá este modelo de desarrollo de Saranda, en el que el campesinado adivasi enfrentaría violencia genocida, sus tierras serían arrebatadas, sus bosques arrasados y sus aguas contaminadas por el bien de las grandes corporaciones y compañías mineras, todo ello en Jharkhand y zonas adivasis en todo el país.

El Estado está tratando de difundir este modelo de saqueo corporativo por todo el país, como parte del Plan Surajkund. La tierra y otros recursos del pueblo les están siendo arrebatados y entregados a las corporaciones por parte del Estado. El Estado cerca el terreno y luego lo entrega a las empresas. Por este motivo se están cambiando las leyes en todo el país, su aplicación, el sistema de justicia y la formulación de políticas. Para lograr este objetivo, el Estado avanza hacia una política de fascistización creciente del país. Las voces disidentes están siendo silenciadas utilizando nuevas leyes de seguridad pública, como la Ley de Seguridad Pública de Maharashtra, en la que el estado adoptó oficialmente la etiqueta roja de las voces disidentes. Ahora, las personas etiquetadas en rojo pueden ser criminalizadas bajo esta ley de una manera más fácil. La Operación Clean también forma parte de este plan de Surajkund. El Estado está tratando de imponer este modelo de desarrollo Saranda también en la región de Kolhaan y, por lo tanto, también está estableciendo más campamentos paramilitares en Kolhaan. Han desatado la violencia contra el campesinado adivasi como parte de esta operación para “limpiar” a los adivasi de estos bosques. El Estado brahmánico ve al campesinado adivasi como un campesinado infrahumano que necesita ser talado de los bosques para aquellos que poseen el capital y obtener una parte de las ganancias de la explotación, porque este lo único que le importa al Estado. Si los paramilitares tienen éxito en sus intentos, el destino de Kolhaan será el de Saranda.

El Foro Contra la Corporación y la Militarización exige el fin de todas las formas de militarización en todo el país, como las Operaciones Clean y Kagaar, que conducirán a la violencia genocida contra el campesinado adivasi, el desplazamiento del campesinado y el saqueo corporativo de sus recursos. Exigimos el fin de la intimidación del campesinado adivasi en Jharkhand; no se debe impedir que el campesinado ejerza su derecho a protestar pacíficamente contra la violencia estatal. Pedimos una investigación judicial independiente sobre los excesos cometidos por el Estado en la región de Kolhaan en Jharkhand en el marco de la Operación Clean, y que se haga justicia para las víctimas de la violencia que ha ocurrido en Kolhaan.

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