Los imperialistas cortan la financiación a UNRWA

Imagen de cabecera: camiones de ayuda entrando a Gaza desde Egipto. Fuente: Al Jazeera

La inteligencia israelí ha afirmado que 12 empleados de UNRWA tomaron parte en la contraofensiva del 7 de octubre, y además, 1.200 empleados de UNRWA tienen conexiones con Hamas o la Yihad Islámica. Como consecuencia, EE.UU., Alemania, Suiza, Canadá, Países Bajos, Reino Unido, Italia, Australia, Finlandia, Francia, Japón y otros han cortado el apoyo financiero a la organización, la cuál distribuye ayuda a los palestinos, maneja campos de refugiados y hospitales. UNRWA ha anunciado que no serán capaces de trabajar como antes a partir de febrero, posiblemente causará un colapso en su operación en la franja de Gaza, donde actualmente no hay suficiente agua y comida, suministros médicos y combustible, y donde más de 26.000 personas han sido masacrados por Israel.

UNRWA tenía en el personal a 13.000 personas en Gaza antes del 7 de octubre. Hamas es el partido político más grande en Gaza, por lo que no es tan inusual que algunos de los empleados estén de alguna forma conectados a éste. En el informe, también se “revela” que al menos la mitad de los empleados de UNRWA en Gaza están relacionados con miembros de Hamas, lo que no es una gran sorpresa considerando que la población de Gaza es un poco más de dos millones. Por tanto, las medidas tomadas por los imperialistas no son proporcionadas y son parte del castigo colectivo.

El ex-jefe de UNRWA, Micahel Schmale, dijo que el momento de la publicación del informe, sólo un día después de la orden de la CIJ, que afirmó que Israel “plausiblemente” comete un genocidio en Gaza, parece motivada políticamente. Un Reportero Especial de la ONU señaló que cortar la financiación de UNRWA es desafiar a la Corte Internacional de Justicia, la cuál un día antes G dijo a Israel que permitiera la ayuda humanitaria efectiva a Gaza, y comentó que si esto ocurre sin repercusiones legales, significa la muerte del sistema legal internacional. Israel abiertamente ha declarado que buscará apoyo internacional para detener las operaciones de UNRWA, el cuál es el mayor proveedor de ayuda en Gaza.

Al mismo tiempo, las protestas israelíes para bloquear la ayuda a Gaza continúan, y los ministros israelíes se unieron a los manifestantes en Jerusalén, quienes exigían el restablecimiento de los asentamientos ilegales israelíes en Gaza y hacían un llamamiento a los desplazamientos masivos del pueblo palestino.

El incidente muestra, de nuevo, que el pueblo palestino sólo puede contar con sus propias fuerzas. Los imperialistas sólo se preocupan por los “derechos humanos” mientras los oprimidos no se rebelen contra los opresores.

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