RU: Sunak promete deportar inmigrantes a Ruanda
Imagen de cabecera: el Primer Ministro del Reino Unido (RU) ha prometido que “parará los botes” trayendo inmigrantes a través del Canal de la Mancha. Fuente: Reuters
La Cámara de los Comunes del RU ha aprobado recientemente una ley declarando Ruanda un país seguro para llevar a cabo un plan para enviar solicitantes de asilo y tener su solicitud procesada allí, y si la solicitud es aprobada, entonces tendrían el derecho de permanecer en Ruanda como refugiados, pero no tendrían permitido volver al RU donde inicialmente buscaban asilo. El primer vuelo dedeportación se suponía que ya estaba previsto para el año 2022, pero fue bloqueado debido a problemas legales. Ahora el plan ha sido atrasado de nuevo debido a que la Cámara de los Lores ha pedido al gobierno que demuestre más claramente que Ruanda es un país seguro.
En noviembre de 2023, el Tribunal Supremo del RU sentenció que Ruanda no es un país seguro, y que los refugiados estarían en riesgo de volver a su país de origen. De acuerdo con el tribunal, esto rompería la Convención Europea sobre los Derechos Humanos, que prohíbe la tortura y el trato inhumano. Ruanda también es conocida por haber tratado mal anteriormente a refugiados, por ejemplo en 2018 la policía ruandesa disparó contra refugiados que protestaban. También están ocurriendo desapariciones forzadas y asesinatos extrajudiciales en Ruanda. Como una respuesta, el gobierno del RU ha presentado una nueva ley declarado Ruanda como un país seguro en la legislación del país. La ONU publicó un informe en enero, en el que esta ley se dijo que era una clara violación de las leyes internacionales establecidas. El primer ministro del RU, Rishi Sunak antes declaró que no dejará que “ningún tribunal internacional nos detenga de mandar vuelos y poner esta medida en funcionamiento”.
Al mismo tiempo, por toda Europa están ocurriendo ataques similares chovinistas contra inmigrantes y llamados a deportar a los inmigrantes “ilegales”. Al mismo tiempo se anima a la inmigración “legal” y “basada en el trabajo”. Países imperialistas como Alemania, Austria, Italia y Dinamarca han expresado interés en examinar la posibilidad de tener un plan similar al del RU. De estos países, Dinamarca ha hecho un pacto en 2022 para mandar inmigrantes a Ruanda, pero esto no ha ocurrido debido a problemas al respecto de la ley internacional. Recientemente, Alemania aprobó una ley para facilitar la deportación de solicitantes de asilo que fuesen considerados “sospechosos” por las autoridades. Como parte de la criminalización de la solidaridad con Palestina, se ha dicho que se examinará la posibilidad de deportar a aquellos que sean vistos sospechosos de apoyar o incluso sean simpatizantes de Hamas si no tienen la ciudadanía alemana. En diciembre, el Parlamento francés aprobó una nueva ley migratoria, la cuál también entre otras cosas facilita las deportaciones, introduce la detención administrativa para aquellos que estén a punto de ser deportados, restablece la “ofensa de residencia ilegal” y hace posible quitar la ciudadanía francesa de la ciudadanía doble si se es condenado por homicidio internacional contra una “persona de autoridad pública”.
Enormes masas del pueblo están abandonando sus propios países de forma creciente, los cuáles han sido destruidos por la guerra, explotación y opresión imperialistas, con la profundización de la crisis del imperialismo. Las masas del pueblo de las naciones oprimidas son “útiles” para los imperialistas, quienes usan su situación desesperada para explotarlas. Sin embargo, sólo quieren aquellos que pueden ser explotados y que no ponen en ningún peligro su dominio. La llegada incontrolada de inmigrantes desde las naciones oprimidas provoca la escalada de las contradicciones de una forma desfavorable para la clase dominante en los países imperialistas, especialmente la repercusión de la contradicción entre imperialismo y las naciones oprimidas en los propios países imperialistas. Para ocultar este hecho, los imperialistas toman medidas, como hacer pactos con sus lacayos, como en el caso de Turquía para evitar que los inmigrantes vengan a Europa, encerrándolos en “campos de refugiados” y dejándolos ahogarse en el Mediterráneo o morir al cruzar los Alpes a pie. Además de las medidas concretas de hacer el viaje a Europa incluso más peligroso para los inmigrantes y hacer su situación incluso más desesperada, este tipo de planes sirven para dividir a la clase obrera. Los imperialistas hablan sobre inmigración “ilegal”, viéndolos como menos que humanos, como hordas amenazantes, e inflaman el chovinismo. Culpan de la crisis a los inmigrantes, y para fingir que hacen algo al respecto de los problemas, lanzan un ataque contra ellos. Al mismo tiempo, vemos más y más cínicas y flagrantes violaciones de la ley burguesa. Incluso si el plan de Sunak no tiene éxito en realidad, servirá para inflamar más chovinismo y animar a una mayor desatención de las leyes internacionales entre la burguesía.
