India: novedades sobre la campaña de boicot electoral

Imagen de cabecera: Explosión de un IED. Fuente: NDTV

Un jefe de la Policía Fronteriza Indo-Tibetana (ITBP) murió por un explosivo plantado por los maoístas en Gariaband, Chhattisgarh, el 17 de noviembre. El jefe estaba escoltando al equipo de oficiales electorales que volvía de los lugares donde se realizaban las votaciones. Esta acción es parte de la campaña de boicot electoral liderada por el Partido Comunista de India (Maoísta) que se lleva a cabo en múltiples Estados federales. Además, se ha reportado un número de encuentros en los distritos de Sukma, Narayanpur y Kanker de Chhattisgarh por las elecciones. La campaña de boicot electoral ha traído serios problemas al circo electoral de las clases dominantes, como hemos reportado anteriormente. Gariaband, donde ocurrió la explosión, era uno de los lugares donde los tiempos de votación estaban limitados por los problemas de seguridad. El 17 de noviembre fue la segunda fase de las votaciones en Chhattisgarh.

Un dispositivo explosivo improvisado explotó matando también un oficial de la CRPF (Fuerza Policial de Reserva Central) en el Estado vecino de Jharkhand, e hirió a otros dos personas el 17 de noviembre. Los paramilitares llevaron a cabo una operación anti-maoísta en la jungla del distrito de Singhbhum Occidental de Jharkhand.

El 16 de noviembre se reportó que un informante de la policía fue ejecutado por los maoístas en Gadchiroli en el Estado de Maharashtra. La ejecución tuvo lugar un día después de la visita del Jefe del Ministerio de Maharashtra en la zona como parte del plan del gobierno de combatir la Guerra Popular a través de la pacificación económica y los programas sociales en vez de sólo mediante medios militares.

En la jungla de Kannur, en el distrito de Kerala, hubo un intercambio de fuego el día 13 de noviembre entre los maoístas y el escuadrón Thunderbolt, una unidad especial de la policía de Kerala. Se reportó que el sonido de los disparos se escucharon en la jungla durante dos horas. No se reportaron bajas por ningún lado. La policía y los paramilitares han estado desplegando un gran número de sus fuerzas en la zona como parte de la operación “manta de seguridad”.

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