Noruega: Frente Rojo – ¡A las calles en el 1º de Mayo!
A continuación publicamos una traducción no oficial de una declaración en ocasión del 1º de Mayo que hemos encontrado aquí.
¡Proletarios de todos los países, uníos!
¡A LAS CALLES EN EL 1º DE MAYO!
El proletariado internacional celebra su día de lucha el 1º de Mayo, junto con todos los pueblos oprimidos del mundo. Este año celebramos este día en una época caracterizada por la guerra y la crisis. El imperialismo se hunde cada vez más en la decadencia, pero con todo lo reaccionario ocurre igual: si no lo golpeas, no cae. Los pueblos oprimidos del mundo combaten y resisten todos los días, así como el heroico pueblo palestino continúa su lucha justificada en medio del genocidio. De esta manera, siguen la lógica de todos los oprimidos: levantarse una y otra vez para luchar. Pero para salir victoriosos, el proletariado y los pueblos oprimidos del mundo deben tomar el poder mediante la guerra popular, bajo la dirección de su Partido y guiados por el maoísmo.
Con esta declaración del Primero de Mayo, nos dirigimos a todos los comunistas y revolucionarios de este país con un fuerte llamado a romper con todo individualismo, a romper con la cómoda vida pequeñoburguesa en un país imperialista y a romper con todo revisionismo y oportunismo, para unirse incluso más bajo el maoísmo y contribuir a la lucha por reconstituir el Partido Comunista de Noruega como parte del movimiento comunista internacional.
La situación hoy
El movimiento de resistencia nacional armada palestino lanzó una poderosa contraofensiva contra el Estado sionista el 7 de Octubre de 2023. Israel se vio sacudido hasta sus cimientos cuando los combatientes y las masas palestinas irrumpieron fuera de Gaza, una pequeña zona de tierra que los sionistas habían convertido en un campo de concentración para 2 millones de palestinos. El movimiento de resistencia, formado por varias organizaciones diferentes, invadió bases militares y derrotó a soldados y fuerzas de seguridad. Atacaron por tierra, desde el aire y desde el mar. Esta contraofensiva fue una gran victoria militar y moral.
Desde entonces, Israel ha azotado con furia brutal y bárbara al pueblo palestino durante seis meses. Israel está cometiendo un genocidio en Gaza. Nuevamente se inflige al pueblo palestino una enorme destrucción y sufrimiento. Israel es el lacayo del imperialismo yanqui: comete genocidio bajo las alas de su protector supremo y con el apoyo de todas las potencias imperialistas occidentales, incluida Noruega. Por otro lado, la heroica resistencia y oposición al genocidio ha generado un movimiento de protesta popular en todo el mundo, que sigue atrayendo nuevos participantes. Los pueblos del mundo han adoptado una posición en favor de Palestina y esto demuestra que, en perspectiva, Israel está condenado a perder.
Al mismo tiempo, la guerra continúa en Ucrania, donde el imperialismo ruso ocupa una quinta parte del país y la nación ucraniana continúa resistiendo. Tanto la guerra en Palestina como la de Ucrania son expresiones de la contradicción principal en nuestro mundo imperialista: los imperialistas en un lado contra las naciones oprimidas en el otro. La heroica lucha de resistencia muestra una vez más que la corriente principal de la revolución proletaria mundial es el movimiento nacional y democrático en las naciones oprimidas – una corriente entre la abrumadora mayoría de los pueblos del mundo.
En la transición a los años 1980, la Revolución Proletaria Mundial, proceso que comenzó con la Comuna de París en 1871, entró en su fase de ofensiva estratégica. Dentro de esta fase, ahora estamos entrando en un nuevo período de revoluciones. La contraofensiva contra Israel es una expresión de este desarrollo. De nuevo vemos que son las masas mismas quienes ponen al mundo patas arriba. Son las masas populares las que cambian el mundo cuando se levantan para combatir y resistir. El marxismo se compone de miles de verdades, pero todas se reducen a una: “¡La rebelión se justifica!”.
¡Barrer todo oportunismo y revisionismo!
Con esta declaración, nos dirigiremos no sólo a nuestros camaradas y amigos, sino a todos los individuos y grupos de pensamiento revolucionario que aún no se han unido al movimiento revolucionario. También nos acercamos a aquellos que todavía trabajan en partidos y organizaciones oportunistas, aunque se consideren a sí mismos comunistas y revolucionarios.
Primero, enfatizamos que los comunistas buscan la unidad. Queremos unir a quienes puedan unirse, en la lucha común por los intereses del proletariado y los pueblos oprimidos del mundo. Defendemos la necesidad del Frente. Por eso tendemos una mano a todo aquel que pueda y quiera trabajar con nosotros. En segundo lugar, esto no es suficiente. Para que haya alguna revolución, se necesita el Partido Comunista Maoísta. El proletariado debe estar unido bajo una ideología y bajo una dirección única. No existe una solución intermedia que pueda hacer realidad el socialismo y el comunismo. Además, sólo hay un camino hacia la liberación del proletariado y de los pueblos del mundo: la revolución y la dictadura del proletariado. Todos los demás caminos, todas las variantes del oportunismo, sólo conducen a nuevas derrotas temporales y nuevas traiciones. No se puede ganar nada en el camino parlamentario, salvo beneficios y privilegios de la burguesía que corrompen.
En un país imperialista como Noruega, la pequeña burguesía y la aristocracia obrera pueden vivir una vida materialmente buena, en comparación con las masas del Tercer Mundo. Esta es siempre una alternativa tentadora para muchas personas que de palabra se unen al proletariado, pero que no dan el paso plenamente en la práctica. Los comunistas y revolucionarios honestos deben aplastar su ego burgués, aplastar el individualismo y unirse bajo el maoísmo en el movimiento revolucionario.
El oportunismo y el revisionismo están estrechamente vinculados al imperialismo. A través de sus agentes en el movimiento obrero, la burguesía corrompe a dirigentes y activistas. Estos se ven adormecidos por una noción falsa de legalismo y reformismo como un camino viable. A través de las universidades y los medios de comunicación, la burguesía siembra división en lugar de unidad, idealismo en lugar de materialismo, individualismo en lugar de colectivismo, reformismo en lugar de revolución.
Los comunistas y los revolucionarios deben ser implacables a la hora de erradicar toda influencia ideológica burguesa en su interior. Puede ser cómodo trabajar para cambiar a los partidos oportunistas desde adentro, continuar con el círculo sectario o quedarse en casa y practicar el “activismo en Internet”, pero no sirve al proletariado ni a los pueblos del mundo. Si realmente quieres contribuir a cambiar el mundo, tienes que romper con estos viejos hábitos y unirte al movimiento revolucionario.
¡Poner el internacionalismo al mando!
El Presidente Mao afirma que el internacionalismo es el espíritu del comunismo. El proletariado es una clase internacional y el proletariado no tiene patria. Estas verdades marxistas son principios básicos que deben guiar a los comunistas en todos y cada una de sus acciones. Sobre la base de estos principios, es deber de los comunistas combatir todas las formas de nacionalismo. El revisionismo y el oportunismo degeneran necesariamente en socialchovinismo: “socialismo” en palabras, chovinismo en acción. Por ello, el partido Rojo pone “Primero Noruega” para “defender los intereses noruegos”. Esto es ajeno al marxismo.
Lenin afirma que “los marxistas se oponen resueltamente al nacionalismo en todas sus formas” y que la lucha exitosa contra la explotación “requiere que el proletariado esté libre de nacionalismo y sea absolutamente neutral, por así decirlo, en la lucha por la supremacía que se libra entre los burguesía de las distintas naciones”. Por lo tanto, los comunistas y revolucionarios en Noruega no adoptan una posición en las luchas entre el imperialismo noruego y los imperialistas extranjeros. Esto contrasta con los oportunistas que apoyan a su “propia” burguesía y, por tanto, terminan apoyando al imperialismo noruego.
Bajo el lema “¡Unirse bajo el maoísmo!” la Liga Comunista Internacional (LCI) fue fundada en 2022. Esta fue una gran victoria política, organizativa y moral para nuestra clase y para todos los comunistas y revolucionarios. En apenas un año, la LCI se ha consolidado como un fuerte impulsor de la continua unificación de los comunistas del mundo bajo el maoísmo. Unirse bajo la bandera de la LCI es poner al internacionalismo al mando y emprender la lucha contra el imperialismo, la reacción y el revisionismo a nivel mundial.
130º aniversario del Presidente Mao – ¡Viva el maoísmo!
El 26 de diciembre de 2023 se cumplieron 130 años del natalicio del Presidente Mao. A través de su dirección de la Revolución China, la Gran Revolución Cultural Proletaria y la lucha mundial contra el revisionismo moderno, el Presidente Mao se convirtió en el gran dirigente reconocido del proletariado internacional y del Movimiento Comunista Internacional. El Presidente Mao elevó, a través de su trabajo teórico y práctico en medio de estas enormes luchas, la ideología del proletariado a una nueva etapa: el marxismo-leninismo-maoísmo.
El Presidente Mao desarrolló aun más la ideología dentro de sus tres partes constituyentes: filosofía, economía política y socialismo científico. Con el presidente Mao recibimos grandes contribuciones a nuestra teoría. En perspectiva, la revolución cultural es su principal contribución, porque es la solución a la cuestión de cómo desarrollar la sociedad desde el socialismo al comunismo, pero aquí y ahora, la contribución más importante del Presidente Mao es la teoría militar del proletariado: la Guerra Popular.
El Presidente Mao muestra que el poder sólo puede conquistarse mediante la guerra revolucionaria y que el proletariado y las naciones oprimidas no pueden hacer la guerra de la misma manera que la burguesía. La Guerra Popular es la guerra de las masas, bajo la dirección del maoísmo y el Partido Comunista, que se lleva a cabo paso a paso estableciendo el nuevo poder del proletariado. Se debe establecer un nuevo poder destruyendo las fuerzas enemigas en un área particular, creando un vacío de poder y movilizando a las masas.
Para librar la Guerra Popular, afirma el Presidente Mao, el proletariado necesita sus tres instrumentos revolucionarios: el Partido, el Ejército Popular y el Frente Único. La Guerra Popular es la única manera de liberar a todos los explotados y oprimidos del mundo. Aceptar esto tiene una serie de consecuencias sobre cómo deben trabajar y organizarse los comunistas; conduce a la necesaria demarcación contra todas las formas de legalismo y reformismo, y al boicot de las elecciones burguesas.
El Presidente Gonzalo dice: “El maoísmo es la elevación del marxismo-leninismo a una tercera, nueva y superior etapa”. El marxismo-leninismo-maoísmo es una doctrina universal, es la única ideología del proletariado. Sin la guía del maoísmo, es imposible conquistar, defender y desarrollar el poder del proletariado. Sin el maoísmo, es imposible que el proletariado lidere revoluciones democráticas, revoluciones socialistas y revoluciones culturales, poner fin a la explotación y la opresión en todo el mundo y llevar a la humanidad al comunismo. Por lo tanto, los comunistas deben hacer del maoísmo su mando y guía. Debemos unirnos bajo el maoísmo.
¡Reconstituir el Partido Comunista de Noruega! ¡Únete al Frente Rojo!
Lenin escribe: “¡Dadnos una organización de revolucionarios y removeremos a Rusia de sus cimientos!” Lenin da al proletariado la teoría de un partido de nuevo tipo: el Partido Comunista, un partido completamente diferente de todos los demás partidos. El Presidente Mao dice: “Para hacer la revolución, se necesita un partido revolucionario. Sin un partido revolucionario, sin un partido creado conforme a la teoría revolucionaria marxista-leninista y al estilo revolucionario marxista-leninista, es imposible conducir a la clase obrera y las amplias masas populares a la victoria sobre el imperialismo y sus lacayos.” Y además: “Con el nacimiento de partidos revolucionarios de este tipo, el rostro de la revolución mundial ha cambiado.” El proletariado internacional constituyó en Noruega su partido de nuevo tipo el 4 de noviembre de 1923: el Partido Comunista de Noruega, sección noruega de la Internacional Comunista. Este fue un gran hito en la lucha de nuestra clase en Noruega.
El Partido Comunista de Noruega (NKP) tiene una historia heroica, especialmente durante la Segunda Guerra Mundial. Después de esta guerra, la dirección del partido fue tomada por el revisionismo moderno, que liquidó al partido al principio de los años 1970. Revolucionarios y comunistas continuaron su labor en el llamado «movimiento ML», pero no se plantearon la tarea necesaria: reconstituir el Partido Comunista de Noruega. Sólo bajo la dirección del marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo, con los aportes de validez universal del Presidente Gonzalo, los comunistas han definido correctamente esta tarea. Nuestro partido ya ha sido constituido, por lo tanto la tarea no es fundar “un partido comunista”, sino reconstituir el NKP como partido maoísta. La única tarea de los comunistas es conducir al proletariado y a las amplias masas populares a la victoria, al comunismo, lo cual sólo es posible si las masas están movilizadas, politizadas, organizadas y armadas bajo una única dirección: el Partido Comunista.
La victoria del proletariado es una necesidad histórica. El capitalismo será reemplazado por el socialismo y la humanidad marchará adelante hacia su brillante futuro común: el comunismo. Pero esto no sucede por sí solo, requiere acción decisiva, organización y dirección. Bajo nuestra bandera roja con la hoz y el martillo dorados, prometemos hacer todo lo posible para que esto suceda lo más rápido posible. ¡El infierno que el imperialismo y el sionismo están creando en Gaza nos llama a redoblar nuestros esfuerzos! Sabemos que el imperialismo seguirá creando un infierno para los pueblos oprimidos del mundo –no sólo en Palestina sino también en Ucrania, Sudán, Etiopía y demás– hasta que sea barrido para siempre por la Revolución Proletaria Mundial, y hasta que el proletariado haya barrido todos los remanentes del dominio burgués en todos los rincones de la tierra, a través de revoluciones culturales hasta llegar al comunismo.
Mientras haya clases, habrá explotación y opresión, pobreza y guerra. Sólo la sociedad sin clases del comunismo pone fin a estas monstruosidades. El comunismo es una necesidad histórica, pero el imperialismo debe ser barrido: no caerá por sí solo, por muy podrido que esté. El imperialismo debe ser barrido por el proletariado y las masas, y debe ser barrido en todos los países. Cada aportación, cada progreso en cada país, fluye junto con las aportaciones hechas por millones de personas en todo el mundo en una inundación poderosa e imparable.
El Frente Rojo es parte del movimiento revolucionario en Noruega. Apoyamos de todo corazón el trabajo para reconstituir el Partido Comunista de Noruega y la lucha por la revolución socialista en este país, como parte y al servicio de la Revolución Proletaria Mundial. Póngase en contacto con nosotros, únase a nosotros y tenga la seguridad de que cualquier aportación, grande o pequeña, es necesaria y apreciada. ¡Únete al Frente Rojo!
¡Viva el maoísmo!
¡Viva la Liga Comunista Internacional!
¡Reconstituir el Partido Comunista de Noruega!
¡Proletarios de todos los países, uníos!
Frente Rojo
Abril 2024
