Turquía: actividades y declaración por el 8 de Marzo
Imagen de cabecera: marcha por el Día Internacional de la Mujer Obrera, Estambul, 3 de Marzo. Fuente: Yeni Demokrasi
Las Mujeres de Nueva Democracia (Yeni Demokrat Kadın – YDK) han llevado a cabo varias actividades por el Día Internacional de la Mujer Obrera en Estambul. YDK estará en las calles el 8 de Marzo de este año con el lema “La Liberación no está en manos del orden dominado por los hombres, está en nuestras manos”.
Las YDK han convocado a las mujeres a unirse a ellas el 8 de Marzo, poniendo dazibaos y repartiendo panfletos en barrios pobres. También se han planteado problemas candentes para las mujeres en estudios en nueve barrios diferentes.
El 3 de marzo miles de mujeres se reunieron en la plaza del distrito Kadıköy de Estambul, y marcharon a través de las calles bajo el lema “Luchemos contra la Pobreza, Violencia, Explotación y la Guerra”. Varias organizaciones de mujeres tomaron parte en la marcha, incluyendo las YDK. Se gritaron lemas como “El 8 de Marzo es rojo y seguirá rojo” así como lemas en honor de los prisioneros revolucionarios.
Se plantearon exigencias por la liberación de los prisioneros políticos recientemente encarcelados, incluyendo el lector de Partizan Arzu Aksakal, con el lema “Que las mazmorras sean destruídas, libertad para los prisioneros”. Los crímenes del gobierno al respecto del terremoto de 2023 fueron denunciados frecuentemente. Fotografías de mujeres asesinadas o desaparecidas en el terremoto así como mujeres asesinadas como resultado de la violencia patriarcal fueron llevadas durante la marcha. La lucha de las mujeres en los lugares de trabajo y universidades también fue planteada así como la solidaridad con aquellos sufriendo por la guerra y ocupación alrededor del mundo. También se mostró apoyo a la lucha de las Madres de los Sábados que han estado exigiendo saber el destino de aquellos que han desaparecido bajo custodia del viejo Estado turco.
También compartimos una traducción no oficial de un comunicado por parte de las YDK:
La carga del mundo sobre nuestros hombros, las tejedoras en nuestra memoria, la lucha por la libertad en nuestra conciencia…
El 8 de marzo de 1857, 40.000 tejedoras se declararon en huelga en Nueva York, Estados Unidos, para exigir «igual salario por igual trabajo». En el incendio que se declaró durante esta huelga, 129 obreras que estaban encerradas en la fábrica perdieron la vida.
La década de 1850 fue la del auge de los movimientos obreros en Estados Unidos. Los obreros industriales trabajaban en condiciones extraordinariamente difíciles. Las mujeres lideraron la clase obrera de la época y se declararon en huelga para exigir la reducción de la jornada laboral de 16 horas a 10 horas, la corrección de las condiciones de trabajo inhumanas, el aumento de los salarios y la igualdad de derechos para las obreras.
Después de esta fecha, en la reunión de mujeres de la II Internacional (Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas) en Copenhague, Dinamarca, Clara Zetkin y Rosa Luxemburgo, dirigentes del Partido Socialdemócrata de Alemania, presentaron la propuesta de que el 8 de marzo fuera el Día Internacional de la Mujer y la propuesta fue aceptada.
Desde entonces, las mujeres han luchado por las reivindicaciones planteadas por las tejedoras asesinadas.
Las mujeres siguieron inspirándose en esta historia de resistencia y salieron a la calle cada 8 de Marzo a pesar de todas las presiones, las difíciles condiciones y las prohibiciones. En todo el mundo, las mujeres han luchado y siguen luchando por su trabajo invisible, ignorado y mal pagado. Como en otros países, las mujeres de Turquía, Kurdistán y Oriente Medio salen a la calle y gritan sus reivindicaciones en las calles.
Hoy en día, las mujeres están condenadas a una mayor pobreza, que se pone de manifiesto por la profundización de la crisis económica a escala mundial, y están siendo masacradas a través de las guerras que tienen lugar en el mundo. Los caminos de la migración se convierten en caminos de muerte para las mujeres. Si no están en la carretera, son objeto de ataques como el acoso y la violación, así como de la pobreza donde se quedan, y son asesinadas en sus hogares, lugares de trabajo y calles como consecuencia de la violencia machista.
En la actualidad, el bloque fascista AKP-MHP, representante del Estado dominado por los hombres, ataca constantemente los derechos adquiridos por las mujeres. Estos ataques se han vuelto aun más temerarios tras la anulación del Convenio de Estambul, que se firmó con la creciente ola de lucha y rebelión de las mujeres. Las mujeres que luchan por sus derechos y conquistas también son objeto de todo tipo de violencia por parte del Estado masculino.
En esta geografía, como en Palestina y Rojava, los pueblos pobres, en su mayoría mujeres y LGBTI+, son masacrados en las guerras que libra el sistema imperialista-capitalista en busca de mercados.
Por otra parte, la masacre flagrante del trabajo y la naturaleza en Erzincan İliç por el Estado patriarcal y sus representantes del AKP-MHP causará graves problemas en la región en los próximos años. Esta masacre volverá a poner una nueva y pesada carga de trabajo sobre los hombros de las mujeres. Ya hoy, las mujeres están preocupadas por su futuro en la región y están pensando qué pueden hacer para que sus hijos tengan un futuro más saludable.
Hemos visto una situación similar en el terremoto del 6 de febrero de Maraş, que se convirtió en una masacre de cientos de miles de personas. Las mujeres se vieron obligadas a soportar cargas muy pesadas para la supervivencia de los que quedaron atrás y siguen intentando sobrevivir en la región del terremoto soportando cargas que se hacen exponencialmente más pesadas.
En las guerras causadas por los soberanos, la carga de los pueblos pobres, la carga de la masacre de la naturaleza y de todos los seres vivos a través de la masacre ecológica, la carga de la masacre de las personas, la naturaleza y los seres vivos de la región a través del terremoto, y la carga de la pobreza causada por la crisis económica también recaen sobre los hombros de las mujeres. Al igual que se ignora su trabajo en el hogar, el valor de la mano de obra que crean en los lugares de trabajo y las fábricas disminuye día a día.
A pesar de todas las innumerables cargas, las mujeres obstinada y persistentemente no renuncian a su lucha en todo el mundo. Nosotras las mujeres, con la carga del mundo sobre nuestros hombros, con las obreras tejedoras en nuestra memoria, continuamos persistentemente la lucha por la libertad que heredamos y grabamos en nuestra conciencia a pesar de todas las guerras, masacres y ataques. Estamos en cada momento de la vida y de la lucha, como en la resistencia de las mujeres palestinas, como en la resistencia de las mujeres de Rojava contra la guerra llevada a cabo por los imperialistas-capitalistas y su lacayo el Estado turco utilizando todo tipo de tecnología, como en la resistencia de las mujeres que llevan sobre sus hombros la carga invisible pero creciente desde el 6 de febrero, como en la resistencia de las mujeres que reivindican su trabajo, que es ignorado y visto como mano de obra barata en Agrobay, Özak, Sputnik, Burda Bebek y en fábricas que no podemos contar. También estamos presentes en la lucha por la supervivencia contra la violencia, el acoso y las violaciones a las que son sometidas en casa con el argumento de la «sagrada familia» del Estado patriarcal, y en el esfuerzo por organizarse en las universidades a pesar de toda la opresión y los ataques. También somos las que ponemos freno al Estado patriarcal que trata con odio de hacer depender nuestras vidas del hilo de algodón con las masacres de ascensores. Somos las mujeres y LGBTI+ que no nos retiramos de los lugares de trabajo, de las calles y de las zonas de acción a pesar de todos los ataques e ignorancias. Estaremos en las calles este 8 de Marzo como cada 8 de Marzo. Continuamos nuestra marcha por la libertad también este 8 de Marzo. Llamamos a todas las mujeres a salir a la calle para engrandecer esta marcha.
¡Viva el 8 de Marzo, viva la solidaridad de las mujeres!
Yeni Demokrat Kadın
