Nuevos Reportes de Acciones del NPA en Filipinas
A continuación compartimos algunos reportes con acciones realizadas por el Nuevo Ejército Popular (NPA por sus siglas en inglés).
La justicia revolucionaria castiga a un violador y toma armas de fuego
A las 5:30 am de día de hoy, una unidad del Comando Roselyn Jean Peolle – Nuevo Ejército Popular (RJPC-npa) llevó a cabo una acción punitiva contra un notorio violador en Barangay Bandila, Toboso, Negros Occidental.
Isagani Imalay, alias “Uko”, perpetró varios cargos de violación e intento de violación, aterrorizando a las mujeres de la comunidad y aprovechándose de las jóvenes y vulnerables.
Anteriormente había sido acusado de violación en un tribunal reaccionario y se le había emitido una orden de arresto, pero debido al trato tibio de su caso por parte de las fuerzas del orden, permaneció impune hasta ahora y ha persistido en sus actos reprensibles de violar a las mujeres.
En marcado contraste, la rama competente del tribunal popular revolucionario se hizo cargo de su caso de inmediato, ante el creciente clamor de justicia de las masas, las propias víctimas y sus familias. Fue juzgado con justicia en un proceso judicial imparcial. Incluso con su condena, se le dio la oportunidad de enmendar sus malas prácticas y reformarse, pero fue en vano, pues permaneció impenitente hasta el final.
Imalay estaba armado hasta los dientes cuando los combatientes rojos lo acorralaron y se resistió ferozmente. Le confiscaron pistolas calibre .45 y .357, y una metralleta Ingram, junto con sus cargadores y municiones.
El castigo de Imalay pone de relieve la superioridad del sistema de justicia revolucionaria popular sobre el sistema judicial, esencialmente inepto, corrupto y elitista, del estado reaccionario. La justicia revolucionaria se resume en las consignas «justo, rápido y equitativo».
Seguramente, el portavoz en línea de las Fuerzas Armadas de Filipinas resucitará nuevamente su imaginario fantasma de “matanza” y presentará el castigo de Imalay como un “asesinato sin sentido” de un civil.
Con esa narrativa, solo se exponen como facilitadores de criminales como el violador “Uko” y otros sinvergüenzas cuyos castigos son recibidos por las masas como un gran alivio de la carga que causaron.
Encuentro con el NPA mata a cuatro soldados de la 4ª División de Infantería
Al menos cuatro soldados del 28.º Batallón de Infantería (BI), bajo la 4.ª División de Infantería (DI), murieron en un enfrentamiento con una unidad del Nuevo Ejército Popular (NPA) en Sityo Kiudto, Barangay Hagpa, Impasug-ong, Bukidnon, el 23 de mayo. Entre los fallecidos se encontraban un teniente y un cabo. Otros cinco soldados resultaron heridos.
El informe del NPA de la Región Centro-Norte de Mindanao indica que el Ejército Rojo disparó primero contra los soldados del 28.º BI. La batalla duró diez minutos, y la unidad del Ejército Popular se retiró inmediatamente y sin incidentes. Mientras tanto, el 28.º BI continuó disparando indiscriminadamente durante treinta minutos.
La 4.ª DI informó inicialmente del encuentro y admitió que sus tropas resultaron heridas, pero no reveló el número registrado de bajas entre sus filas. Los soldados utilizaron un helicóptero Black Hawk para recuperar a los muertos y heridos.
Los soldados de la 4.ª DI, derrotados, respondieron disparando seis proyectiles de cañón contra las granjas de los vecinos. Este acto terrorista militar causó gran temor, trauma y la destrucción de sus medios de vida.
El comandante de la 4.ª DI aumentó la moral de la 28.ª BI, que había perdido o herido tropas, al reconocer a las tropas heridas como “héroes”, pero no reconoció a los soldados que murieron.
Mientras tanto, el NPA lanzó una operación de hostigamiento contra las fuerzas del 88º BI en Sityo Dinalhagan, Barangay Balagnan, Esperanza, Agusan del Sur el 8 de mayo. La operación de hostigamiento del Ejército Rojo tuvo como objetivo a las mismas tropas en el sitio nuevamente el 18 de mayo. Esto causó tensión entre los brutales soldados y sus operaciones de combate.
Otras acciones reportadas
Al menos tres miembros del 62º Batallón de Infantería fueron eliminados por un lanzagranadas por el Comando Leonardo Panaligan del NPA el pasado 14 de junio. Este ataque viene motivado por las justas demandas del pueblo contra las continuas operaciones militares, intimidación y acoso.
Se ha llevado a cabo la orden del jurado popular revolucionario que, bajo exigencia de las masas, demandaba el castigo de un espía militar responsable de la redada del 18 de marzo a un campamento temporal del NPA.
