Turquía: Convocatoria por el 8 de Marzo
A continuación publicamos una traducción no oficial de la convocatoria del Colectivo Morado-Rojo por el 8 de Marzo de 2024, publicado en Avrupa Haber.
EL 8 DE MARZO ES DE QUIENES LUCHAN POR SUS DERECHOS, ¡Y NO A LOS QUE ESPERAN POR SUS DERECHOS!
El 8 de Marzo de este año, las mujeres tendremos que escuchar nuevamente las afirmaciones del sistema imperialista y la cultura reaccionaria dominada por los hombres, sobre que se han logrado grandes avances en los “derechos de las mujeres”. Con motivo del 8 de Marzo, se expresará una vez más en la televisión, en los parlamentos, en las plazas, en las tribunas y en las plataformas internacionales que las libertades de las mujeres desde la vida laboral a la vida social y los derechos fundamentales se han ampliado y deben ampliarse. El 8 de Marzo celebrarán el “Día Internacional de la Mujer” con mayor “entusiasmo” que nosotras y darán discursos sobre los derechos de las mujeres.
Por un lado, nos dirán la mentira sobre cuánto han avanzado en materia de derechos de las mujeres y, por otro lado, oscurecerán el significado histórico, el contenido y la esencia del 8 de Marzo. Oscurecerán la estructura de clases de la lucha de las mujeres por los derechos y la libertad y pretenderán que fueron ellos quienes otorgaron a las mujeres sus derechos.
Sin embargo, sabemos cuál es la verdad. El 8 de Marzo de 1857 es la sangrienta historia de una huelga organizada por 40.000 obreras en Nueva York para exigir “la reducción de la jornada laboral de 16 horas a 10 horas e igual salario por igual trabajo”. Durante la huelga, la policía encerró a miles de obreras en la fábrica con el apoyo de los patrones, y 129 obreras en huelga murieron en las llamas provocadas allí. En la Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas de 1910, por sugerencia de Clara Zetkin, el 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer Obrera, se dedicó a la memoria de las huelguistas asesinadas.
La realidad de la burguesía imperialista y de todas las fuerzas reaccionarias que hablan de los derechos de las mujeres oscureciendo el carácter de clase del 8 de Marzo, que es el nuestro, es completamente diferente. En docenas de países semifeudales y semicoloniales como Turquía, incluso nuestros derechos más básicos son como un oasis en el desierto. El ejercicio de muchos derechos fundamentales como el derecho a la vida, la inviolabilidad, la libertad y la seguridad, la libertad de establecimiento y de viaje, la libertad de pensamiento y de expresión, la libertad económica, el derecho al trabajo y al divorcio y el derecho a participar en política son derechos que son difíciles y, cuando los ejercemos, las mujeres somos asesinadas, expuestas a la violencia, aisladas y expuestas a la presión social. Sólo en Turquía, 52 mujeres fueron asesinadas por diversos motivos en enero de 2024. En países como India, Afganistán, Pakistán, los países de Medio Oriente, América Latina, África y Turquía, la violencia brutal y el asesinato de mujeres están a la orden del día.
En países como Europa, el “centro de la civilización”, las mujeres parecemos tener un acceso más fácil a los derechos básicos, pero las condiciones y relaciones sociales aquí también están dominadas por el dominio masculino. Esto se refleja en violencia física, presión emocional y psicológica y desventaja económica. Cuando los imperialistas hagan sonar los tambores de la guerra, aumentando el armamento y el chauvinismo, nos enfrentaremos a su demostración de violencia, que incluye todo esto. En esta demostración de poder, la primera y mayor victimización vuelve a nosotros como lenguaje, actitud y opresión en forma de dominación masculina. La respuesta a esto es más violencia, más exclusión y encarcelamiento, más feminicidio. El asesinato de siete mujeres en 24 horas el 27 de febrero es sólo un resultado de esta escalada. Europa, que se presenta como el centro de la libertad, existen problemas complejos. Somos el principal grupo laboral en relaciones laborales flexibles y precarias. Estamos “condenadas” a trabajar por menos salario. Seguimos siendo las mayores responsables del trabajo de cuidados. Todas las consecuencias del empobrecimiento, como el estrés, la tensión y el sufrimiento, van principalmente en detrimento de las mujeres. Nosotras, obreras y mujeres, cuyo acceso a los derechos básicos se hace más difícil, también estamos sometidas a condiciones laborales más duras, acoso y a ser mano de obra barata. Esta crisis económica se está volviendo cada vez más clara a medida que aumentan el belicismo y el chauvinismo.
Los imperialistas, que son enemigos de los pueblos y de las mujeres obreras, nunca podrán ocultar su verdadero rostro en las guerras que libran o provocan. En Palestina, la maquinaria de guerra del Israel sionista está llevando a cabo una masacre que no hace distinción entre niños, mujeres y ancianos. Las mujeres son el eslabón débil de esta crueldad. Por un lado, están siendo masacradas con un bloqueo despiadado, por otro, son tratadas como objetos “oprimidos” en los intentos de lograr un alto el fuego. Para denigrar la resistencia palestina, los imperialistas están desarrollando una vez más la guerra psicológica sobre los cuerpos de las mujeres. En la figura de los “palestinos bárbaros” el problema de las mujeres se utiliza hipócritamente como palanca.
El podrido sistema imperialista, con las guerras y las políticas semicoloniales que causa y provoca, crea destrucción económica, lo que conduce a un importante problema de emigración. Las rutas migratorias están en la red de un brutal sistema de contrabando. En estas rutas las mujeres estamos expuestas al acoso, la violación y todo tipo de violencia. La terrible experiencia de las mujeres que se establecen en otros países como migrantes nunca termina. Se ven obligadas a convertirse en mano de obra barata. Además, se ven asfixiadas entre la cultura de la sociedad de la que proceden y la cultura de la sociedad en la que viven y están condenadas a soportar todo tipo de dificultades. Aquí también las obreras migrantes son las más afectadas por la violencia y el acoso sexual. Cuando se trata de ejercer sus derechos básicos, enfrentan todas las dificultades relacionadas con la conciencia, el equipamiento y las insuficiencias, así como con la identidad femenina. Todos los aspectos obstaculizadores, opresivos y restrictivos del sistema estatal, la vida familiar y social son parte de la vida de las obreras migrantes.
El sistema imperialista, con su capital en decadencia, su cultura degenerada, su democracia hipócrita, su estructura cuya otra característica es la guerra, es el centro de producción de todo tipo de reacciones que usurpan los derechos y la libertad de las mujeres y nos arrastran al vórtice de la dominación masculina. Sus alianzas con las fuerzas feudales en sus semicolonias son misóginas. El chovinismo, el rearme y las políticas de guerra que fomentan en sus propios países también se basan culturalmente en la supremacía masculina y alimentan la misoginia. La miel que nos untan en la boca es para que nos contentemos con lo que tenemos a nuestra disposición y aceptemos nuestro destino. Lo que a su vez significaría que aceptamos su sistema misógino, chupasangre y explotador, incluida la supremacía masculina.
No lo aceptaremos. No nos someteremos. No rehuiremos nuestra lucha. No nos conformaremos con derechos limitados y simbólicos. No habrá liberación de las mujeres obreras mientras no se seque la fuente de explotación, violencia, pobreza, agresión y guerras injustas. Pelearemos nuestra batalla con la conciencia de la liberación completa, nada menos. Llevaremos nuestra lucha no con espíritu liberal, sino con espíritu revolucionario.
Por esta razón, el 8 de Marzo no es un simple “Día de la Mujer” ni un instrumento de la cultura de consumo capitalista.
8 de Marzo;
– … es un llamado a luchar contra las guerras imperialistas injustas.
– … es un llamado a la rebelión contra la explotación múltiple y la opresión de las obreras.
– … es un llamado a ampliar la organización y la lucha revolucionaria de las mujeres en este proceso en el que aumenta la explotación y se introducen leyes “esclavistas”.
– … es un llamado a luchar contra todas las imposiciones de la cultura patriarcal, la reacción religiosa y toda forma de discriminación.
– … es un llamado a organizarnos contra la violencia estatal contra las mujeres comunistas, revolucionarias y progresistas en los calabozos, en las cárceles y en las calles.
Como colectivos Morado-Rojo, afrontaremos el 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer Obrera, en las calles y plazas con todo nuestro entusiasmo, desafiando “la frustración y la desesperación”, aplastando la misoginia, oponiéndonos al saqueo y la explotación imperialista, y nunca dejarnos encadenar por fascismo y feudalismo.
¡VIVA EL 8 DE MARZO, DÍA MUNDIAL DE LA MUJER OBRERA!
¡FIN A LA EXPLOTACIÓN SEXUAL, NACIONAL Y DE CLASE!
¡NO A LA PROMOCIÓN, EXPLOTACIÓN Y PARASITISMO DE LA GUERRA IMPERIALISTA!
COLECTIVO MORADO-ROJO
MARZO 2024
