
Protestas contra Statkraft en Brasil
El periódico Tjen Folket Media ha reportado acerca de nuevas protestas contra Statkraft, en esta ocasión en Uibaí, Bahia, Brasil, contra la construcción de una planta solar. Statkfraft es una compañía cuya propiedad es del Estado noruego dedicado a la producción eléctrica con plantas solares, eólicas e hidroeléctricas. Tiene plantas en Europa, Asia y América Latina, entre ellos Perú, Chile y el propio Brasil, donde desde hace años planeaban aumentar su producción para 2025.
Las protestas que han estallado en Uibaí están lideradas por 50 organizaciones que forman la alianza Grito do Caatinga, que bloquearon la carretera que provee acceso a la construcción de la planta solar. Llevaban pancartas y gritaban consignas contra la autoridad ambiental, por haber aprobado el proyecto y contra la propia empresa, pidiendo su expulsión del bosque Caatinga.
La autoridad medioambiental ha concedido a Statkraft 1.524 hectáreas en el bosque de Caatinga, además de cuevas, cascadas y asentamientos arqueológicos para instalar 1.384.282 paneles solares. A esto hay que sumarle que previamente, en 2021, ya habían desarrollado plantas eólicas con 91 turbinas divididas en 14 granjas eólicas. Con el parque solar, la planta será uno de los primeros proyectos híbridos de Brasil, combinando energía eólica y solar y baterías para el almacenamiento.
Sin embargo, la tierra está siendo robada a las comunidades de campesinos, principalmente a Fundo y Fecho de Pasto, que han cultivado la tierra por más de 300 años, además de dos comunidades quilombolas, en beneficio del imperialismo noruego. Por otra parte, esta planta tiene un efecto muy negativo en la fauna, llegando a poner en serio peligro muchas de las especies autóctonas.
En noviembre fiscales en Bahía demandaron a Statkraft por ir en contra de la legislación medioambiental y de derechos humanos y consiguieron que se paralizara el proyecto, pero ahora esta decisión ha sido revocada por un tribunal superior. Por ello continúan las protestas.
No es la primera vez que Statkraft se enfrenta a protestas de los campesinos a los que roba las tierras. En 2023, Tjen Folket Media también reportó como campesinos mapuches se manifestaron en Noruega exigiendo el cierre de la planta hidroeléctrica en el río Holy Pilmaiquén. Los campesinos mapuches fueron apoyados por el pueblo Sami en lucha contra las turbinas eólicas en Trøndelag, que declararon durante las marchas “el pueblo Mapuche tiene mucho en común con el pueblo Sami en Noruega, y que tienen un enemigo común en Statkraft.” y “Apoyamos al pueblo mapuche. Es vergonzoso que Noruega también destruya los derechos humanos en el extranjero. Es posible resolver la crisis climática sin disparar y robar”.