Estado español: Fascistas de Desokupa formarán a más de 30.000 policías en técnicas paramilitares ilegales
A continuación compartimos el siguiente artículo publicado en Servir al Pueblo.
El Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la organización paramilitar fascista Desokupa, dedicada a la ejecución ilegal de desahucios y desalojos, han firmado un acuerdo en el que Desokupa formará en “defensa personal” 30.000 agentes de policía. El curso será homologado y puntuable para el acceso al empleo público en los procesos de consolidación/estabilización de la plaza de los agentes como funcionarios.
Desokupa es una empresa dedicada, valga la redundancia, a la “desokupación”. Como hemos dicho antes, la actividad económica de la desokupación no es nada más ni nada menos que ejecutar desahucios y desalojos allá donde la policía no puede o no quiere hacerlo, y para ello utiliza técnicas paramilitares e ilegales por la propia legislación burguesa. En un artículo anterior decíamos que las empresas de desokupación son parte del plan de militarización del Estado español:
“La existencia de empresas como “Desokupa” forma parte del plan contrarrevolucionario de esta ofensiva ideológica del Estado español. Se trata de nada más, y nada menos, que fuerzas de choque de la oligarquía financiera. Reclutan fascistas y a los reaccionarios más casposos de la vieja sociedad, les arman, les brindan apoyo mediático y judicial, y les mandan como los perros rabiosos que son a combatir contra movimientos de masas. Ahora están en una situación inicial y se centran más contra el okupa individual, pero en perspectiva, buscan combatir y eliminar a la fuerza organizada de las masas, especialmente a las fuerzas dirigentes. El reciente caso de Barcelona es ejemplo claro de esto [Hablábamos de una manifestación “antiokupa” convocada en mayo del pasado 2023].
Son tropas de choque de la oligarquía financiera y emplean la violencia ilegal. El Estado necesita este tipo de tropas que operan al margen de su propia legalidad, lo vimos también con los GAL salvando mucho las distancias. El constante apoyo de los medios de comunicación a estos mercenarios del capital financiero en forma de entrevistas y reportajes tiene por objetivo normalizar la violencia contra las masas, incluso la violencia ilegal que ejerce el Estado saltándose sus propias leyes”