Víctimas del terremoto protestan en Turquía
Imagen de cabecera: manifestantes atraviesan una barricada policial durante una protesta en Hatay. Fuente: Yeni Demokrasi
El 6 de febrero fue el primer aniversario desde el devastador terremoto que golpeó el sur y centro de Turquía, y el noroeste de Siria. Alrededor de 60.000 personas murieron y millones perdieron sus casas. En el aniversario hubo enormes protestas en las áreas afectadas por el terremoto, exigiendo a aquellos culpables por la escala de la destrucción que fueran declarados como responsables y exigiendo mejoras en sus condiciones. Muchos siguen viviendo en contenedores y tiendas en condiciones inaguantables, enfrentándose al creciente desempleo y explotación. Hemos escrito anteriormente sobre las luchas de las víctimas. En algunos lugares, el Estado también ha intentado evitar que el pueblo protestase y conmemorase el aniversario en sus términos, como en Malatya, donde la gobernación prohibió todo tipo de conmemoraciones del terremoto sin permiso de la gobernación.
En Antakya Köprübaşı, Hatay, la cuál fue la región más afectada por el terremoto, los manifestantes se reunieron a las 04:17, el momento en el que se produjo el terremoto hace un año, en el parque Yunus Emre, y llevaron a cabo una conmemoración. Tras esto, la policía rodearon con barricadas la zona y no permitió que los manifestantes abandonasen el parque. La barricada fue rota por la multitud, que se dirigió al edificio de apartamentos de Rana, a conmemorar a aquellos que murieron en él. El alcalde de la municipalidad metropolitana de Hatay, Lütfü Savaş fue recibido con abucheos y gritos de “¡dimisión!” procedentes de la multitud.
También el ministro de sanidad Fahrettin Koca, quién asistió a la conmemoración oficial en Antakya, Hatay, se enfrentó a la furia de las masas, y fue abucheado durante su discurso. La multitud gritó “¡Gobierno dimisión!” y “¡No renunciamos a nuestros derechos.!”. También en Adıyaman, el gobernador Osman Varol y el anterior ministro Adil Karaismailoğlu fueron abucheados.
En Antakya, Defne, se organizó una marcha por parte de organizaciones revolucionarias y democráticas. En la marcha, se destacó que el pueblo no olvidará ni perdonará, pero quiere que los culpables sean responsabilizados por ello, y que no fue un terremoto, que fue una masacre. En el discurso de la plataforma conjunta la cuál organizó la marcha, se exigieron muchas mejoras para las condiciones de las víctimas del terremoto, como reconstrucción de las casas sin gastos adicionales o sin que los propietarios se endeuden, mejora de los servicios de electricidad, agua y gas natural y que éstos deberían ser distribuidos gratuitamente a las víctimas del terremoto, medidas para proteger a las mujeres de la violencia, y que se debería distribuir sopa para aquellos sin casa durante el invierno.
En Samandağ, Hatay, los manifestantes llevaron pancartas con los lemas “¡No olvidar, hacer responsable!”, “¡No olvidar el 6 de febrero, no dejar que sea olvidado!”, “¡El Estado mata, no los terremotos!”, y “¡El pueblo hará responsables a los asesinos!”. En los discursos fue denunciado que el Estado ha dejado al pueblo sólo lidiando con la destrucción, y que la destrucción, fue hecha por el hombre, no fue el “destino”.
En Tarso, se llevó a cabo una marcha. Se gritaron los lemas “¡No olvidar el 6 de febrero, no dejar que sea olvidado!”, “No olvidar, no perdón, no decir adiós”, “Esto no es un terremoto, esto es una masacre”, y “Destruiremos el orden del saqueo”, y en el discurso, el papel del gobierno en la destrucción fue denunciado. También fue denunciado que a pesar del presupuesto adicional emplazado en la reconstrucción, en muchos lugares no está ocurriendo nada. Al final del discurso fue destacado como la solución es luchar contra el sistema corrupto, el cuál es hostil contra el pueblo, los obreros y la naturaleza.
También hubo protestas en Maraş, Adıyaman, Malatya, Kilis, Osmaniye, Adana, Antep, Diyarbakır y Urfa.
Además de estas protestas, el grupo de música revolucionaria İsyan Ateşi publicó dos canciones en conmemoración de las víctimas del terremoto.