
AND: Ejército desarrolla proyectos para combatir al ‘enemigo interno’
Publicamos una traducción no oficial del artículo de A Nova Democracia encontrado aquí.
En las últimas semanas, el Ejército reaccionario brasileño ha sido recompensado con la noticia de grandes sumas para el desarrollo de “proyectos estratégicos”: al menos R$ 1,5 mil millones serán destinados por el PLOA [nota de traductor: Projeto de Lei Orçamentária Anual –Presupuesto anual] 2024. Entre los proyectos estratégicos anunciados hasta el momento por el Estado Mayor de la fuerza terrestre, se destaca el desarrollo de drones y nuevos helicópteros, con una previsión de uso enfocado en la región amazónica.
A los mil millones y medio, se añade los R$ 52,8 mil millones del Nuevo PAC [nota de traductor: Novo Programa de Aceleração do Crescimento – Nuevo Programa de Aceleración del Crecimiento] destinados al conjunto de las Fuerzas Armadas, de los cuales el Ejército recibirá R$ 12,4 mil millones del total.
En reciente entrevista con el monopolio de prensa del Estado de São Paulo, el jefe de gabinete de la corporación, el general Fernando José Soares, declaró: “La aviación, en el caso del Ejército, tiene que ver con los helicópteros, con aumentar nuestra capacidad de transporte tropas, especialmente en la región amazónica. Y además incluir [sic] en este paquete un nuevo equipamiento que son los drones”.
Dada la historia de la fuerza reaccionaria y la región amazónica, la declaración es intrigante. Se sabe que el mayor interés del ejército reaccionario brasileño no es la defensa de la región contra países extranjeros y potencias externas. Solo desde 2017 se han realizado al menos tres ejercicios conjuntos con el ejército yanqui en la Amazonia, además de otros ejércitos extranjeros.
En 2017, se hizo el AmazonLog en “cooperación” con los ejércitos reaccionarios de Perú y Colombia bajo la supervisión del Ejército yanqui (Estados Unidos, EE. UU.) . Se realizó Otro ejercicio militar en Rondônia en 2020 bajo la supervisión del exsecretario de Estado yanqui y ex-agente de la CIA Mike Pompeo, en el que se simuló un enfrentamiento entre un Ejército de un “país rojo” contra un “país azul”. Aún se espera que se lleve a cabo el “ Core 2023 ” , a realizarse nuevamente junto al Ejército yanqui.
Ejército ya utilizó la aviación para reprimir a campesinos
La historia del Ejército con equipo aéreo para propósitos militares tampoco indica un enfoque en la defensa contra amenazas extranjeras. En la década de 1970, el Ejército, aún sin aviación propia desarrollada, utilizó helicópteros de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) en operaciones contra la Guerrilla de Araguaia, entre las cuales dos fueron derrotadas. Las operaciones del ejército incluyeron torturas a campesinos y guerrilleros, además de ejecuciones y espantosos vuelos sobre la región donde los cuerpos de los ejecutados fueron colgados en los aviones.
Unos veinte años después, el ejército reaccionario brasileño realizó la primera operación de su propia aviación. Esta vez, en un operativo conjunto con el ejército reaccionario colombiano contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). El grupo, compuesto principalmente por campesinos armados, no tiene aspiraciones expansionistas en Brasil, sino la lucha armada por la tierra en Colombia. Según el propio Ejército, la operación de las FARC no se trató de “expansionismo”, sino de represalia por la represión del Ejército brasileño contra los campesinos buscadores de oro en la región amazónica. La justificación del Ejército para la respuesta, denominada “Operación Traición”, tampoco se refería a la “defensa contra una amenaza extranjera”, sino a una operación de recuperación de armas. El saldo fue de 12 guerrilleros muertos por las tropas reaccionarias.
La situación en la Amazonia hoy no es significativamente diferente de lo que el Ejército pretendía combatir en la región de Araguaia, a partir de 1972, o en el territorio amazónico colombiano, en la década de 1990, a pesar de la diferencia en la existencia de guerrillas lanzadas tanto en Araguaia en 1967 -74 como en Colombia. Está comprobado que la región amazónica es escenario de la lucha por la tierra en el país, hay decenas de miles de campesinos involucrados en los llamados “conflictos por la tierra” en la región, según los últimos informes de la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT).
Los nuevos proyectos son, por lo tanto, el mantenimiento de la estrategia militar del Ejército Brasileño, transmitida de generación en generación a través de los planes de estudios de la corporación, con el objetivo de combatir el “enemigo interno”. La planificación estratégica de los militares, después de todo, es solo una muestra de su desesperación ante la posibilidad de nuevas rebeliones campesinas en la Amazonia.