Extractos del Editorial – Trump reaviva la guerra contra las drogas para profundizar su dominación en América Latina
El periódico Nueva Democracia (ND) de Colombia ha publicado un Editorial sobre la política del imperialismo yanqui sobre la no tan nueva “guerra contra las drogas” en América Latina. Esta táctica no es nueva, habiéndose implementado en lugares como Panamá, México o la propia Colombia con el “Plan Colombia”. En el año 2000, donde de los 1.300 millones de dólares que recibió el gobierno colombiano, el 80% fueron para el fortalecimiento de las fuerzas armadas.
El periódico declara: “La “guerra contra las drogas” y la movilización de tropas yanquis es parte de esa trayectoria histórica de sometimiento del imperialismo yanqui a los pueblos del mundo.”
De forma similar ocurrió en Oriente Medio con las invasiones de Afganistán en 2001, Libia en 2011 o con la falsas “armas de destrucción masiva” en Irak en 2003.
“Aunque es evidente que la llamada «guerra contra las drogas» no es en realidad una guerra contra los narcóticos, sino una defensa de los intereses geoestratégicos de la potencia imperialista y la excusa para el mayor sometimiento a los pueblos y saqueo de recursos. (…)”
“La semana pasada, Trump declaró que Estados Unidos está en un «conflicto armado» con los cárteles de la droga y que tratará a sus miembros como «combatientes ilegales» (…) Así, se preparan las condiciones políticas para poner a la orden del día una nueva edición de la vieja política, con la manipulación de la opinión pública y los «permisos» y formas adecuadas para perpetuar la agresión dentro de su estructura reaccionaria de gobierno yanqui.”
Como indican los propios políticos yanquis, América Latina es de mucha importancia para los intereses del imperialismo yanqui por sus grandes recursos mineros – litio, cobre u oro – o por las grandes reservas de petróleo, que se ven amenazados por la gran inversión de China en la zona.
ND añade sobre la movilización de tropas hacia el sur del Mar Caribe: “Así, este nuevo capítulo de intervencionismo comienza hoy y se agudiza con Venezuela, que ante los ojos de los yanquis representa el 18% de las reservas mundiales de petróleo y la puerta de entrada del «peligro» ruso y chino en la región, dentro de sus disputas interimperialistas por nuestros recursos.”
Mientras tanto, los gobiernos al servicio del imperialismo de la región muestran su verdadera careta: en México Sheinbaum deporta prisioneros mexicanos buscados por EEUU mientras dice que colaborará “sin sumisión ni invasión”. Lula, desde Brasil, anuncia que cancela ejercicios militares con EEUU, pero mantiene la Operación Atlas, de gran envergadura en la frontera con Venezuela. Petro, en Colombia, condena una posible invasión a Venezuela, pero llama “mafiosos” a quienes quieren romper las relaciones entre EEUU y Colombia, criminalizando a los antiimperialistas.
Según el periódico, no es factible por el momento una invasión total o parcial de Venezuela por la cantidad de frentes abiertos de guerra (Ucrania, Palestina y Oriente Medio en general) y los planes estratégicos se sitúan en Asia-Pacifico para contener el avance del socialimperialismo chino, pero el intervencionismo yanqui en América Latina no es nuevo, habiendo sometido ya anteriormente a las naciones de la región para cumplir con sus planes e instaurar regímenes militares para reprimir brutalmente al pueblo. También añaden:
“Aunque la agresión militar parezca una señal de fortaleza, en realidad es una debilidad, una carta a la que acuden las potencias en tiempos de crisis, en tiempos de guerra, cuando declina su control hegemónico del mundo en su competencia interimperialista, y cuando se prenden fuegos por doquier.”
Actualmente en América Latina se está viviendo una ola de lucha popular. En Perú y Ecuador han habido levantamientos contra los gobierno reaccionarios y lacayos del imperialismo. En Brasil hay una fuerte lucha de los campesinos pobres dirigida por la Liga de los Campesinos Pobres (LCP). En Colombia hay una mayor movilización en la lucha, sobre todo en el movimiento de campesinos y el de solidaridad con Palestina
ND señala también la fundación de la Coordinadora de Luchas Populares – CLP como frente de sectores independientes y antiimperialistas para impulsar y desarrollar la lucha popular y la defensa de los derechos de los pueblos de Colombia y el mundo. “Esta importante iniciativa se suma al importante movimiento antiimperialista que se está fortaleciendo en América Latina y el mundo donde la Resistencia Nacional Palestina es el faro que ilumina el camino.”