Informes internacionales breves: situación explosiva en el sur de Asia
Imagen de cabecera. Protestas y choques en Jiribam, Manipur. Fuente: Hindustan Times.
A continuación compartimos un resumen de algunas noticias internacionales de protestas y luchas que se están desarrollando en el sur de Asia.
India
El lunes 11 de noviembre, Manipur presenció una de las masacres más grandes desde hace semanas en la región: 11 supuestos militantes de diferentes organizaciones fueron asesinados por parte del viejo Estado indio en el distrito de Jiribam. Después de ello diversas organizaciones del pueblo Kuki-Zo convocaron huelga general en la zona de las colinas. En el propio funeral que se llevó a cabo, la policía fue a provocar y aquellos que honraban a sus muertos no dudaron en chocar con las fuerzas represivas.
Enormes protestas han estallado y las masas han atacado casas de representantes parlamentarios e incluso ministros de Manipur están fortificando sus residencias ante el miedo ante la ira del pueblo. El viejo Estado indio intenta controlar la situación imponiendo la prohibición de acceso a internet y enviando hasta 10.000 soldados de refuerzo. Además ha desatado una brutal represión y en una protesta en Jiribam un joven fue asesinado por la policía cuando ésta intentó dispersar a la multitud.
En Assam numerosos jóvenes quemaron efigies de Narendra Modi y se manifestaron contra la construcción de una presa en su territorio, un megaproyecto de expolio en su territorio y que supondría la expulsión de numerosos campesinos indígenas de sus territorios.
En Punjab también han estallado las protestas. El viernes cientos de campesinos chocaron contra fuerzas represivas del viejo Estado indio. El gobierno anunció la adquisición de lotes de tierra bajo el pretexto de un megaproyecto que iba a ejecutar en la zona y esto fue protestado por los campesinos. En los choques seis policías fueron heridos y se vieron barricadas alzadas por los campesinos.
Hay nuevas protestas planificadas para mañana contra “las políticas anticampesinas, antiobreras y antipopulares del gobierno indio.”
Bangladés
Los obreros del sector textil protestan incesantemente contra la feroz explotación a la que se enfrentan. Tras el cambio de gobierno y la instauración de Muhammad Yunus como dirigente interino del país, nada ha cambiado para el proletariado bangladesí. Este último ha bloqueado carreteras principales del país durante días reclamando que se le pague sus salarios. Los proletarios mostraron el combativo carácter de sus protestas montando barricadas.
Los estudiantes se han sumado a las protestas en la Universidad de Dacca, exigiendo justicia por los proletarios asesinados en el país. Ayer los conductores de tuk-tuk, un sector muy movilizado en el país, volvió a bloquear las calles de numerosas ciudades del país.
A su vez la semana pasada estallaron protestas estudiantiles masivas en las que más de 3.000 estudiantes participaron y chocaron con la policía debido a la muerte por negligencia médica de uno de ellos. A raíz de la protesta fueron heridos 35 estudiantes. Las últimas semanas han sido en las que más movilizaciones ha habido en el país desde la expulsión de Sheikh Hasina.
Myanmar
La lucha entre el régimen militar (se le conoce como la ‘Junta’) y los rebeldes continúa siendo feroz. Recientemente 20 personas fueron asesinadas en bombardeos realizados por parte del régimen militar. En uno de estos ataques, una bomba de 500 libras fue lanzada en una tienda llena de civiles, asesinando a 11 de ellos e hiriendo a otros 11. Mientras tanto los rebeldes siguen asestando golpes y tomando bases militares importantes en diversos puntos del país. Recientemente el Ejército de Liberación Nacional Karen (KNLA) tomó una base crucial. Por otra parte, otra fuerza rebelde, el Ejército por la Independencia de Kachín (KIA) junto con otros grupos ha tomado decenas de pueblos en varias regiones del país. Se estima que en la “Operación 1027” lanzada por diversas fuerzas contra la Junta hace un año, se han tomado 48 pueblos, centenares de bases militares y policiales y eliminado a varios miles de soldados, obligando al Estado de Myanmar a instaurar reclutamiento masivo obligatorio.
