Revueltas tras el fracaso electoral en las Comoras
El miércoles estallaron manifestaciones, un día después de que la junta electoral declarase a Azali Assoumani, presidente de las Comoras, como ganador, dándole un cuarto mandato de cinco años. Hubo amplias acusaciones de fraude.
El miércoles el ejército disparó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes en Moro, capital del archipiélago del Océano Índico, con una población de alrededor de 800.000 habitantes. El ministro de interior anunció un toque de queda nocturno el miércoles, pero los manifestantes siguieron en las calles en el norte de Moroni en las primeras horas del jueves.
Han aparecido barricadas en vario caminos en la capital y un número indeterminado de manifestantes ha sido arrestado. Fuerzas estatales han luchado contra manifestantes en las calles que les lanzaban piedras. Edificios en la capital han sido vandalizados, saqueados y quemados, incluyendo la casa de un ministro. Un coche en la casa de otro ministro también ha sido quemado y un silo de comida del país ha sido quemado durante las protestas. Los servicios de internet han sido cortados, las llamadas de WhatsApp han sido bloqueadas y los mensajes de móvil restringidos para evitar que los manifestantes se comuniquen y compartan imágenes comprometidas en redes sociales.
Al menos una persona, un hombre de 21 años ha sido asesinado, probablemente tiroteado, y al menos hay 25 heridos, incluyendo un niño de siete años, y algunos están seriamente heridos, de acuerdo con las informaciones que hay.
Comoras ha experimentado varias revueltas, golpes o intentos de golpe de estado desde su independencia formal de Francia en 1975 y tiene vínculos estrechos con la cercana colonia francesa Mayotte debido a la gran migración.
