
Sobre la situación en Ecuador antes de la farsa electoral
Ante las próximas elecciones publicamos estos tres artículos de Ecuador:
SANGRIENTAS CONTRADICCIONES INTERBURGUESAS PREVIAS A LAS ELECCIONES, PUEBLO DEL ECUADOR, NO VOTAR, BOICOTEAR LAS ELECCIONES

Publicamos el artículo de Frente de Defensa de Luchas del Pueblo en el Ecuador encontrado aquí.
La crisis del viejo Estado burocrático-terrateniente se agudiza. Todo está contaminado por el narcotráfico y la delincuencia organizada. Policía, FFAA, ministerios, presidencia; la corrupción es panacea. Ahora, han entrado a otro momento de disputa, de beligerancia, donde los atentados, asesinatos, son la vía utilizada para dirimir sus contradicciones.
¿Quién está atrás de las elecciones?, El imperialismo yanqui, definitivamente. Le urge un nuevo posicionamiento y reencauche a su presencia en la región. El conflicto en Ucrania ha puesto en tensión las contradicciones Interimperialistas entre EEUU y Rusia/China.
Pensar que el proceso electoral en el país esté ajeno a este escenario es tremendamente erróneo.
Las contradicciones internas entre las dos facciones de la gran burguesía; la burguesía compradora y la burguesía burocrática ha sido atizada, llevada a extremos cuyo corolario último ha sido el asesinato del candidato de la burguesía compradora, Fernando Villavicencio. Todo Esto sirve al imperialismo, son actos que de una u otra manera están articulados.
La contradicción Interburguesa llevó, inclusive, a que sectores de la izquierda marxista domesticada, como el PCMLE, UP, PSE, PCE y otros asuman posición por uno de los contendientes, Yaku Pérez; Gonzales, fortalecida por el correísmo; y así una repartija de conciencias que también compromete al movimiento indígena y sindical que lo único que han terminado por hacer es fortalecer esa estúpida y subjetiva dicotomía entre correístas y no correístas; para estos miopes de la política, para estos miserables oportunistas no hay nada más en el país que estos dos frentes políticos.
Villavicencio, un claro operador de la CIA en el país, fue sacrificado para dar paso a las pretensiones del imperialismo. Su asesinato no solo es obra de una banda delincuencial en contra de otra banda de narcotraficantes; es más profundo, es mucho más que eso, acá interactúan los intereses del imperialismo por posicionar sus políticas guerreristas, intervencionistas. Si las bandas mataron a Villavicencio, quienes mueven sus hilos asesinos son los gringos. ¿Acaso en el país no ha cobrado fuerza aquello de incrementar la presencia militar de EEUU en el país con bases militares?, ¿acaso no se ha difundido la idea de que el país termine siendo un protectorado de los EEUU porque los gobernantes no pueden controlar la grave conmoción interna? ¿Acaso en el país no se convoca a una dictadura militar a sabiendas de que los militares son operadores estratégicos de las bandas y que están al servicio del imperialismo?
Y en medio de todo esto, nos incitan pecuniariamente a votar, a asistir las urnas. Son tan democráticos que, si no asistimos a las urnas, nos multan, nos quitan derechos ciudadanos.
Volvieron las ofertas electorales, como en mercado, en bazar. Vieja verborrea que ya no convence a nadie. Hay quienes sostienen que votemos nulo, como si esa fuese la solución. Lo sostienen porque por ahora no tienen su candidato terciando en la pantomima electoral. Con toda seguridad, el voto nulo cambiará por votar en el 2025 por su candidato presidencial posicionado de mejor manera en el escenario electoral. Es cosa de escenarios, no más. Igual, es oportunismo.
¿Qué debemos hacer?, ¡NO VOTAR!, ¡BOICOTEAR LAS ELECCIONES! No solo como una forma de deslegitimar las elecciones como instrumento de engaño y sometimiento de las masas, sino como una expresión de rechazo a todo lo que está sucediendo en el país. Hace dos años las mayorías volvieron una vez más a las urnas, y fuerzas oscuras aliadas a la izquierda domesticada pusieron al banquero al frente del aparato burocrático del país. Los resultados son más que obvios; nos ha llevado a esta vorágine de hambre, desocupación y violencia; en definitiva, votando no conseguimos nada, absolutamente nada, así ha sido desde siempre, porque las elecciones tienen carácter de clase y sirven, como es lógico pensar, a la clase que detenta el Poder.
Que las dos facciones de la gran burguesía diriman sus contradicciones entre ellos con sangre, sicariatos, asesinatos, etc., está bien, que se maten entre ellos, pero no permitamos que las masas tomen partido por ninguna de las dos corrientes burguesas. Recordemos, la burguesía compradora, aliada a los banqueros, a los importadores, al sistema financiero y grandes terratenientes; la burguesía burocrática, aquella que necesita estar cerca del aparato burocrático para reproducirse, no solo políticamente, sino económicamente, tal es el caso de Correa y corrientes afines.
Las masas deben salir de ese circuito del mal, de la violencia, de la componenda, del tráfico electoral; las masas no tienen otro camino que la guerra popular, la revolución de Nueva Democracia.
Pueblo del Ecuador, basta de creer a los electoreros. No importa si enarbolan banderas rojas acompañadas de cánticos revolucionarios; es una farsa, una vil mentira. No importa si utilizan ponchos, wiphalas o se vienen con un discurso ecológico, cultural; son lo mismo, quieren aprovecharse de las elecciones para traficar con la miseria de nuestro pueblo. No nos dejemos arrastrar por los rambos, o las guarichas [nota de traductor: mujer joven indígena] que hoy se muestran como viudas tristes por la muerte de su candidato; quieren jugar con las emociones para seguir con su perorata electoral. NO VOTAR, BOICOTEAR LAS ELECCIONES, ES EL CAMINO DEL PUEBLO.
PUEBLO DEL ECUADOR: ¡NO VOTAR!
¡SOLO CON LUCHAS SE CONQUISTAN DERECHOS Y LIBERTADES!
LA CONSULTA POPULAR SOBRE EL ITT Y EL CHOCO ANDINO, UNA PATRAÑA MÁS DEL VIEJO ESTADO

Publicamos el artículo del Frente de Defensa de Luchas del Pueblo en el Ecuador encontrado aquí
La explotación minera en lo que hoy corresponde a los territorios del Ecuador no es nueva; por el contrario, es de viaja data. Se estima que en nuestros territorios se explota la minería desde hace 3.500 años, en el período de Valdivia Tardío.
A lo largo de la historia, la explotación minera ha estado vinculada a un hecho en concreto; el desarrollo de las fuerzas productivas.
En el Reino de Quito, en la etapa pre incásica ya se explotaban el oro y la plata. Más allá de la valoración religiosa/cultural, ciertos metales como el platino y el cobre fueron incorporados a la producción, como herramientas, más adelante, como armas. Con los Incas, no fue diferente el uso de la minería, aunque ellos desarrollaron más el uso de los metales y en alguna medida explica por qué de su superioridad el momento de someternos e implementar un régimen esclavista.
Con la colonia española, la explotación minera toma otro ritmo y otro significado; no responde a las necesidades de nuestros pueblos, sino a sostener el poder feudal e la corona.
A fines del siglo XIX, la explotación minera en el país es monopolizada por los ingleses, quienes se posicionaron sobre esa producción por mucho tiempo, explotación que eventualmente ha tenido ciertos relevos o frentes con la presencia depredadora de los EEUU, Canadá, Australia, hasta llegar a nuestros días, donde la explotación minera ha puesto en tensión a varias potencias capitalistas e imperialistas que pugnan por hegemonizar la explotación y comercialización de hidrocarburos y minería metálica, llevándose en sacos la riqueza nacional.
¿Es mala la minería?; ¡No!, definitivamente, lo malo es que su explotación no responde a la necesidad de nuestro país, a un correcto y necesario proceso e industrialización y desarrollo de sus fuerzas productivas. Todo lo que se explota se va del país, a cambio, nos dejan tierras infértiles, devastadas; además, profundos conflictos sociales. La explotación minera por sí sola no es nociva; es más, el imperialismo racionaliza la explotación minera dentro de sus fronteras, pero, en los países del tercer mundo lo hacen con ínfulas depredadoras, porque reducen costos y les importa un carajo el daño que hacen.
En lo que va del siglo XXI, se ha incrementado la explotación minera en el país. Con el régimen de Correa entramos en un proceso de reprimarización de la economía, es decir, regresar al sector primario, a la explotación minera, pesquera, forestal, agrícola; atizando las contradicciones entre el Estado y los territorios indígenas; mayor especulación y acaparamiento de la tierra, concesión de millones de hectáreas a grandes empresas mineras; incremento desmedido de la frontera agrícola, etc., pero, sobre todo, profundizando y evolucionando la semifeudalidad.
En el Ecuador el imperialismo, en el último tercio del siglo XIX, desarrolló capitalismo en una sociedad feudal, sin que esto haya implicado la democratización de las fueras y medios de producción; no hubo ni hay desarrollo de la industria, consiguientemente de la minería. Este capitalismo entremezclado con relaciones feudales se llama capitalismo burocrático. Producimos materia prima, de ahí que la explotación minera no sea beneficiosa para el país en su conjunto. Esta, como una posición objetiva que contrasta antagónicamente con la verborrea revisionista que señala que el país es capitalista.
La mita ha evolucionado, se presenta adquiriendo nuevas formas. Comunidades enteras Familias son incorporadas a la explotación minera bajo la premisa de generación de trabajo y ayuda comunitaria (los operadores sociales de las mineras implementan enganches o engaños con la comunidad, desarrollando proyectos de crianza de animales menores, reciclaje, etc.), no solo en el sector informal, sino también en el formal. El trabajo infantil forzado en la minería informal es evidente. Hoy, en el Ecuador, los mitayos se han reproducido bajo la egida de las grandes, medianas y pequeñas empresas mineras.
El régimen del burgués comprador de Lasso, aprovechando las elecciones presidenciales ha convocado a una consulta popular para «decidir» si se explota petróleo en la reserva del Yasuní y minerales en el Chocó Andino.
Más allá de la consulta, es por demás evidente que si el viejo Estado, azuzado por las transnacionales, quiere explotar el ITT en el Yasuní y arrasar el Chocó Andino lo hará con o sin consulta; lo hará con o sin consulta previa, libre e informada, como ya lo han hecho en la provincia de Cotopaxi, Bolívar, Azuay e Imbabura, donde a pesar de la negativa de la población a la explotación minera, la penetración de las empresas es un hecho y ya han causado un daño ecológico y social irreparable.
Los ambientalistas se oponen decididamente a la explotación minera; sin embargo, en el seno de las comunidades indígenas en la Amazonia, de varias provincias del país se explota la tierra y los aluviales en búsqueda del oro, A la final, renta más extraer algunos gramos de oro que aquello que produce una hectárea de yuca o de cualquier otro producto. ¿Se le puede acusar de ilegal a un indígena/campesino que explota oro que le renta más ingresos con relación a la anémica producción agrícola?, por supuesto que no.
Los comunistas nos oponemos a la explotación de petróleo y metales en el país; y nuestra oposición no pasa por un argumento ambientalista, y esto no quiere decir que no sea importante, sino que hay otros elementos de mayor peso a confrontar; lo fundamental es que de dicha explotación va a parar a manos de las transnacionales y del imperialismo; no beneficia en nada a las grandes mayorías, salvo a ciertos gobernantes, funcionarios y empresarios corruptos.
Para nosotros, los comunistas, oponernos a la gran minería, es oponernos al imperialismo, es lo fundamental. Es asumir una posición de lucha directa y en el terreno en contra del imperialismo. La lucha contra la gran empresa minera se inscribe en la lucha de liberación nacional, porque propicia la derrota y expulsión del imperialismo, en todas sus facetas, del país.
No estamos de acuerdo con la explotación del ITT, el Chocó Andino, ni ningún otro yacimiento en el país, porque beneficia directamente al imperialismo. Y, por el contrario, estamos de acuerdo en que se debe respetar y respaldar la producción minera artesanal, porque esa beneficia a campesinos pobres, sin tierra, a mineros artesanales que tienen que trabajar duramente para poder llevar el mendrugo de pan a sus hogares. Oponernos a esta minería es favorecer a la gran empresa minera vinculada al imperialismo o seguir relegando el problema de la tierra y su uso. El problema agrario debe ser atendido y resuelto ya, ahora.
¿Qué la empresa artesanal, a la que estigmatizan como ilegal, está infiltrada de narcos, bandas, etc.?, desde luego; tanto como la gran empresa minera que hace alianzas innombrables para sostener su producción y arrebatar las tierras a los comuneros y campesinos pobres. Basta ver los «cordones de seguridad» que tienen las grandes empresas mineras que sustentan el nervio económico de los grupos violentos en el país para que “despejen” las tierras concesionadas o la presencia de mineros artesanales.
Reivindicamos el derecho a luchar por la expulsión de las grandes empresas mineras, porque se llevan los recursos naturales, porque destrozan las selvas, páramos y demás; también porque disocian las comunidades, corrompen a los funcionarios públicos y porque no aporta en nada al desarrollo nacional. Pero también reivindicamos el derecho de los mineros pobres, artesanales, al trabajo, a explotar la tierra con el mismo derecho que el viejo estado les entrega o concesiona territorios a las transnacionales.
NO A LA EXPLOTACIÓN HIDROCARBURÍFERA EN EL YASUINÍ Y EL CHOCÓ ANDINO, es la consigna, la misma que no necesariamente debe ser expuesta y “defendida” en la consulta popular planteada por el régimen, sino como una acción combativa consciente de lucha en contra del imperialismo en territorio, en las minas, en las tierras concesionadas; es más, que dichas tierras que están por encima de los 3 millones de hectáreas, sean expropiadas y pasen a manos de los campesinos sin tierra, para que puedan argumentar su subsistencia.
Los comunistas nos oponemos a la consulta popular, porque al igual que las elecciones, pretenden hacernos creer que desde ese acto “democrático” nosotros estamos decidiendo sobre los designios del país, en este caso, del qué hacer con los minerales, los territorios y las relaciones sociales en su seno. ¡NO!, esa es una patraña más. Debemos oponernos a la consulta y a quienes la fomentan, ya seas desde los intereses del viejo estado, como desde la perorata cansina de los ambientalistas cuyo discurso está aherrojado a la defensa del medio ambiente por encima de la defensa de los intereses que tienen los campesinos sobre la tierra y el trabajo.
Si no queremos minería a gran escala; pues combatamos por expulsarla, y aun así es insuficiente, porque saldrá en su relevo la gran burguesía ecuatoriana.
Hay que precipitar la revolución de Nueva Democracia, solo de esa manera podremos propiciar una explotación minera responsable, que esté en sintonía con las necesidades de la nueva sociedad, de su industrialización, de su defensa.
No pequemos de ingenuos pensando que la explotación minera en el país aportará al beneficio de las grandes mayorías, en absoluto. Es una trampa, no diferente a cómo se ha presentado con la explotación de hidrocarburos. Tampoco caigamos en el discurso de los ecologistas y demás reformistas, convertidos en los guardabosques del viejo estado, no entienden la dinámica de la supervivencia de las masas campesinas, del subproletariado y proletariado minero que trata de argumentar su existencia en la explotación minera a baja escala; pero, sobre todo, no caigamos en la emboscada de la consulta popular, porque el Estado, le pertenece a una clase en concreto y lejos estamos de tomar o incidir en este tipo de decisiones transcendentales.
¡NO A LA CONSULTA POPULAR, SI A LA EXPULSIÓN DE LAS GRANDES EMPRESAS MINERAS!
¡POR LA DEFENSA DE LOS MINEROS ARTESANALES Y SU DERECHO AL TRABAJO!
¡ORGANIZAR, COMBATIR Y RESISTIR!
¡HONOR Y GLORIA ETERNA PARA EL CAMARADA JAIME RANGEL!

Publicamos el artículo del Partido Comunista del Ecuador – Sol Rojo encontrado aquí.
Con profundo pesar hemos recibido la noticia de la muerte del camarada Jaime Rangel, fundador de la Unión Obrera Comunista de Colombia.
Si bien es cierto nuestro Partido tiene algunas controversias y desencuentros teóricos e ideológicos con los camaradas de la UOC, de ninguna manera los vemos como parte de la otra orilla, de aquella que desdeña de la revolución, de la ideología, del marxismo-leninismo-maoísmo; por el contrario, la interlocución con los camaradas nos ha permitido llevar adelante una importante lucha de dos líneas, motor del desarrollo ideológico del MLM; por lo tanto, no tenemos reparo en sostener que hemos coincidido en importantes pronunciamientos, como aquel de la lucha en contra del Revisionismo y el Centrismo y, de manera particular, reconocer en el camarada Rangel su locuacidad, su gran capacidad de análisis, su profundo conocimiento de la teoría científica del proletariado, el MLM; pero, sobre todo, su ejemplar vida entregada a la Revolución Proletaria Mundial.
Tuvimos la oportunidad de compartir con él en un encuentro de aproximación que llevaron a cabo nuestras organizaciones hace ya algunos años. Si bien es cierto, no pudimos sellar acuerdos que nos permitan bregar en un mismo sentido, siempre nos quedó la convicción de haber tratado con un comunista honesto, serio, inteligente y profundamente comprometido con la transformación revolucionaria de su país.
Nuestro partido, el PCE-SOL ROJO se solidariza con los camaradas de la UOC, con la clase y el pueblo de Colombia, sin lugar a dudas, han perdido a un valeroso comunista que ha marcado el ritmo de la lucha ideológica en un país como Colombia, donde la diversidad de criterios y posiciones no ha permitido anclar un punto de unidad en la ideología que les permita avanzar en la única tarea posible que tiene el proletariado: la revolución.
El Camarada Rangel tiene un lugar en la historia del proletariado internacional y con total certeza sostenemos que ¡vivirá en el corazón y luchas de la clase y de los pueblos oprimidos del mundo!
¡HONOR Y GLORIA ETERNA PARA EL CAMARADA JAIME RANGEL!
¡VIVA EL MARXISMO-LENINISMO-MAOÍSMO!
A CONQUISTAR EL SOL ROJO DE LA LIBERACIÓN: ¡EL COMUNISMO!