El imperialismo yanqui afirma haber realizado un primer ataque terrestre contra Venezuela
El presidente del gobierno estadounidense, Donald Trump, afirmó el 29 de diciembre que se realizó un primer ataque terrestre contra Venezuela, que habría tenido lugar en una zona portuaria, según informa A Nova Democracia (AND). De confirmarse, sería el primer ataque yanqui sobre tierras venezolanas, siendo según explica AND “una nova etapa de agresión yanqui al subcontinente latinoamericano. La declaración fue hecha, hombro con hombro con otro genocida, el primer ministro de “Israel”, Benjamin Netanyahu, con quién está reunido en Mar-a-Lago, Florida”.
Según el monopolio CNN, el ataque fue realizado por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y realizado con drones, en una zona no identificada. El ataque habría ocurrido a final de la semana pasada. Los yanquis afirman haber atacado una “gran instalación” y haberla destruido.
AND explica que “a pesar de sumarse a las decenas de ataques hechos a Venezuela, y al continente americano en los últimos meses, inaugura un avance en la intervención imperialista en América Latina”, ya que es la primera vez que se realiza un bombardeo “no sólo a Venezuela, sino también al Cono Sur como un todo, además de ser el primer bombardeo yanqui en toda América Latina desde el siglo pasado, ahora durante una nueva etapa de descomposición agonizante del imperialismo”.
La operación se produce sin declaración formal de guerra y violando toda ley internacional y acuerdo de los llamados “organismos multilaterales”. AND explica que “Este tipo de ofensiva integra una estrategia más amplia de militarización del subcontinente latinoamericano”, y el imperialismo yanqui busca “consolida su presencia militar en el Caribe y el Cono Sur con el objetivo de combatir el peligro de las Revoluciones y las organizaciones de lucha armada, y al mismo tiempo, intentar disuadir rivales imperialistas como Rusia y principalmente China, y reafirmar su control global sobre rutas estratégicas y recursos naturales”.
AND apunta que la aplicación de este cerco naval, retórica de “seguridad” y política contrainsurgente, con una ampliación militar en países como Perú, Ecuador, Paraguay y Bolivia, podrían sentar precedentes para ser aplicados en otros países, incluyendo el propio Brasil.
La agresión del imperialismo yanqui ha conllevado protestas y movilización en muchos lugares del mundo, incluyendo movilizaciones contra la intervención yanqui en el propio corazón del imperialismo, en Miami, donde el 23 de diciembre hubo protestas para exigir el fin de las amenazas y sanciones contra Venezuela. En Colombia el Ejército de Liberación Nacional (ELN) emitió un comunicado condenando la “Nueva Estrategia” del imperialismo yanqui. También organizaciones progresistas y activistas se han movilizado en Europa, por ejemplo en Italia, en defensa de Venezuela.
Medios como la Asociación de Nueva Democracia – Alemania, “Nuevo Perú” ha caracterizado de forma clara la intervención yanqui como una “En el caso que nos ocupa es intervención directa con el despliegue del conjunto del potencial político, económico y militar de los Estados Unidos, la superpotencia imperialista hegemónica única contra un país débil del Tercer Mundo. En colusión y pugna con Rusia y demás países imperialistas. Es guerra de agresión imperialista contra un país oprimido en su primera fase. No estamos en la etapa previa de los preparativos y creación de la opinión pública interna y externa, esto se ha realizado durante varios periodos de gobiernos de los Estados Unidos, varias decenas de años.”
